Cuarenta y dos personas, en su mayoría de edad avanzada, murieron el viernes por la mañana en un choque entre un autobús y un camión en una carretera en el suroeste de Francia.
Cuarenta y uno de los fallecidos son pasajeros del autobús y el otro es el chofer del camión. Los dos vehículos se incendiaron durante el choque frontal. Algunas de las víctimas murieron quemadas vivas.
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Cinco pasajeros consiguieron salir del vehículo en llamas, pero están heridos. El autobús transportaba a personas mayores que iban de excursión a las Landas, más al sur.
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Una habitante de la zona declaró a la televisión I-télé que el accidente se produjo en una curva considerada peligrosa. (Lea aquí: Al menos 16 muertos y 30 heridos en choque de tren y bus en México)
El presidente francés, François Hollande, de visita oficial en Atenas, afirmó que el gobierno "está totalmente movilizado por esta terrible tragedia".
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El primer ministro Manuel Valls, así como los ministros de Interior y de Transporte, Bernard Cazeneuve y Alain Vidalies, se dirigían hacia el lugar de la tragedia.
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En Twitter, Valls expresó su "emoción frente a este pesado balance" y su "apoyo a las familias de las víctimas".
No se descarta que el jefe de Estado, que manifestó su "tristeza" por "este terrible accidente", acuda al sitio del accidente tras regresar de su viaje a Grecia.
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El violento choque frontal se produjo en la comuna de Puisseguin, en una carretera al noreste de Burdeos (sudoeste de Francia). Ambos vehículos se incendiaron.
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Según el portavoz del ministerio del Interior Pierre-Henry Brandet, entrevistado en I-télé, cuatro personas "sufren heridas graves", dos con quemaduras y dos con lesiones en la cabeza. "El número de víctimas podría aumentar", dijo.
"Los socorristas se enfrentan a una operación particularmente difícil", añadió. Las autoridades requisaron varios terrenos para facilitar las operaciones.
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Tres personas salieron indemnes, según la prefectura, que representa al gobierno en la región.
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Los pasajeros del autobús eran miembros de un club de tercera edad, que salieron el viernes por la mañana de un pueblo situado a pocos kilómetros de donde ocurrió el accidente para realizar una excursión.
Según un comunicado de la presidencia francesa, el camión transportaba madera.
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El prefecto de la Región, Pierre Dartout, acudió de inmediato al lugar del accidente para coordinar la ayuda.
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Por el momento se desconocen los motivos de la colisión, pero al parecer uno de los vehículos habría invadido el carril contrario y el otro no pudo evitarlo.
Es el accidente de carretera más mortífero desde 1982 en Francia, año en el que una colisión entre dos autobuses que dejó 53 muertos, entre ellos 44 niños, en una carretera en Dijon (este).
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El accidente de 1982, que fue entonces el más mortífero en 33 años en Francia, fue causado por un frenazo repentino del primer autobús.
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A diferencia de ese drama que involucró a numerosos vehículos, el accidente de este viernes involucró únicamente a dos vehículos.
AFP.