Cementerio Libre del Quindío, la respuesta liberal a los cementerios católicos

En Circasia, Quindío está el ubicado el Cementerio Libre un lugar lleno de historia, reconocimiento y anécdotas.

John Jaramillo Ramírez, historiador y además familiar de Braulio Botero, fundador del cementerio, explicó en entrevista con En Blu Jeans que “durante toda esa época de la hegemonía conservadora los cementerios eran de la Iglesia Católica y los curas decidían quiénes podrían ser enterrados allí o no”.

Según relató, para la década de los años 20 murió un filósofo y espiritista que no era religioso y aunque su familia intentó enterrarlo en el cementerio de Circasia, el párroco del municipio lo impidió, por lo que tuvieron que enterrarlo en una finca.

Después de la polémica, el espiritista Braulio Botero decidió trabajar en la construcción del Cementerio Libre, para poder enterrar a todos los fallecidos, así fueran ateos.

Sin embargo, en la actualidad no se pueden realizar ritos religiosos dentro del lugar. Tampoco se pueden poner cruces ni estrellas de David, sino sólo la lápida con el nombre y la fecha del fallecido.