del Magdalena se debe a un proceso de renovación ambiental que se está haciendo en la ciudad, Brigitte Baptiste, directora del Instituto Humboldt, rechazó esta actividad y la calificó de bestial.
“Sinceramente me parece una bestialidad, es exactamente el síndrome de falsa modernidad y falso desarrollo que estamos experimentando. Esto no tiene nada de desarrollo. Lo que hay detrás son visiones del urbanismo que no todos compartimos”, manifestó.
Publicidad
“Yo no me imaginó qué clase de sombras van a dar esas nuevas luminarias en las avenidas de Santa Marta, una ciudad que se está calentando por el efecto del cambio climático. Creo que son decisiones muy erróneas”, agregó.