Gustavo Petro ya no es alcalde de Bogotá: Procuraduría ratifica destitución

En tiempo récord, el procurador Alejandro Ordóñez ratificó la destitución e inhabilidad de 15 años contra el alcalde de Bogotá, quien deberá dejar el Palacio Liévano luego de dos años y 12 días.

El pasado 9 de diciembre, el procurador Alejandro Ordóñez falló una destitución e inhabilidad por 15 años sobre el alcalde de Bogotá por las tres irregularidades que encontró en la implantación del sistema de aseo en diciembre de 2012.

Este mismo lunes 13 de enero el procurador negó la recusación que había presentado la defensa del alcalde de Bogotá con base en un auto del 2003, emitido por el entonces magistrado de la Corte Constitucional, hoy fiscal Eduardo Montealegre, en el que sentencia que el Senado no puede reemplazar las funciones de la Procuraduría y la última instancia debía ser el mismo Ordóñez.

El viernes 10 de enero, el alcalde había adelantado durante una manifestación en la Plaza de Bolívar que entre lunes y martes la Procuraduría ratificaría la decisión de su destitución e inhabilidad por 15 años.

El 21 de junio pasado el ministerio público abrió proceso disciplinario por tres cargos contra el alcalde de Bogotá, a causa del sistema de recolección de basuras y que, según dijo, se instauró con irregularidades.

La Procuraduría dio a conocer que luego de recoger pruebas y escuchar en versión libre al propio alcalde, decidió formular pliego de cargos contra Petro, quien el 18 de diciembre hizo entrar en vigor un nuevo esquema de recolección de basuras.

El juicio disciplinario se había abierto por la expedición del decreto por el que la Unidad Administrativa Especial de Servicios Públicos (Uaesp) entregó el manejo del sistema de recolección de basuras a la Empresa de Acueducto y Alcantarillado de la ciudad.

También por el decreto 564 del 14 de diciembre, en el que habría violado el principio de libertad de empresa al impedir que operadores privados de basura prestaran el servicio.

Asimismo por el decreto 570 del 14 de diciembre, que autorizaba el uso de vehículos tipo volquetas para recoger las basuras de la ciudad. Dijo la Procuraduría que la decisión pudo violar las normas constitucionales del medio ambiente.

“Son faltas gravísimas a título de dolo”, comentó en su momento la Procuraduría sobre los dos decretos.

El ministerio público afirmó que la Unidad Administrativa Especial de Servicios Públicos otorgó a la Empresa de Acueducto y Alcantarillado de Bogotá el contrato para el nuevo sistema de recolección de basuras con seis días del margen de aplicación, sin saber si la compañía tenía facultades para desarrollarlo.

El 18 de diciembre entró en rigor el esquema de basuras del alcalde Gustavo Petro. En los primeros días de funcionamiento se vivió en la ciudad un caos por el la acumulación de residuos en las calles. El distrito alegó que los operadores que salieron de circulación temporalmente sabotearon el proceso.