El director del Departamento de Gestión del Riesgo, Mauricio Parodi, confirmó que la fecha definitiva de reapertura de la autopista Medellín-Bogotá depende de la ANI, a través del concesionario Devimed.
Según el funcionario, la vía no se encuentra en alerta roja, sino, naranja, porque se ha removido más del 80 % de la tierra que genera la inestabilidad del terreno y que mantiene la vía cerrada desde hace dos semanas.
De acuerdo con Parodi, la voladura controlada que realizaron el primero de enero, generó grietas en el talud y precipitó la caída de rocas gigantes, lo que retrasó los trabajos de manera significativa.