La pandemia por coronavirus también cambió las proyecciones de periodos de contaminación del aire en Medellín y el Valle de Aburrá, una región que cada año enfrenta dos momentos con aumento de contaminantes del aire: entre febrero y abril y entre octubre y noviembre.
Este año, la región metropolitana está próxima a entrar al segundo periodo propenso para que haya emergencia ambiental, sin embargo, aunque hay transición a un periodo húmedo, la cantidad de vehículos circulando ha disminuido con las cuarentenas y también hay menor ocurrencia de incendios, por lo que “es poco posible que se dé un nuevo episodio crítico que afecte la calidad del aire de Medellín y el área metropolitana”.
Esa es la principal conclusión de un estudio de la Universidad Nacional liderado por Carmen Elena Zapata Sánchez, profesora del Departamento de Geociencias y Medio Ambiente, y coordinadora del Laboratorio de Calidad del Aire (Calaire) de la Facultad de Minas de la Universidad Nacional, sede Medellín.
“Debido a que en el actual periodo del año se presentan menos incendios por tratarse de una época en la que iniciaron las lluvias (las cuales lavan la atmósfera), el segundo episodio de contaminación atmosférica es de menos afectación. Para este momento del 2020, hay baja probabilidad de que se presente, debido a que (...) tenemos casi el 50% del parque automotor guardado, entonces no estamos generando tantas emisiones”, explicó la profesora.
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#AnálisisUNAL | Por ahora hay baja probabilidad de un segundo periodo de contaminación atmosférica, pero no se puede bajar la guardia, dicen expertos.
— Sede Medellín UNAL (@MedellinUNAL) September 21, 2020
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El Laboratorio Calaire concluye que hay baja probabilidad de una segunda contingencia ambiental por calidad del aire en el Valle de Aburrá y cree que si se presenta, tendrá niveles inferiores a los registrados en momentos de contaminación de años anteriores.
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Finalmente, la Coordinadora Zapata explicó que el hecho de que no se presente una contingencia a final de año no quiere decir que se deba bajar la guardia en regulaciones ambientales para futuras emergencias por mala calidad del aire.
Agregó que “decimos que hay baja probabilidad de este periodo con problemas ambientales porque tenemos muchas lluvias y el IDEAM publicó que hay una probabilidad de que estas sigan y así habrá lavado atmosférico y por eso no creemos que no habrá elevados niveles de contaminación que obliguen a declarar alertas”.