El alcalde de Medellín, Daniel Quintero, sostuvo que su Plan de Gobierno tiene esta propuesta para modificar un modelo que calificó de obsoleto como es el pico y placa actual de cuatro dígitos y tres horas al día.
Esta medida que ha regido históricamente sólo promueve la compra de un segundo vehículo para las personas que quieren evitar la restricción, por lo que no se cumple el objetivo de descongestionar las vías y mejorar la calidad del aire de Medellín.
Aunque el mandatario local ratificó que no habrá pico y placa hasta que se termine la vacunación masiva del coronavirus, sí se implementará este modelo de un dígito todo el día que generaría que los propietarios guarden su vehículo un día cada quincena.
"Una vez se implemente el pico y placa, lo más probable es que va a ser una vez cada quince días. Ya hicimos los estudios y, contrario a lo que uno imaginaría de forma intuitiva, tiene mejores reducciones en el tráfico que lo que tenía el pico y placa anterior", manifestó.
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Agregó Quintero que "tenemos estudios que demuestran que sería mejor, que no genera el efecto de compra del segundo carro, porque es una vez cada quince días".
Medellín se mantendrá sin pico y placa hasta que logremos por lo menos completar la vacunación de los mayores de 60 años.
— Daniel Quintero Calle (@QuinteroCalle) March 16, 2021
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En las calles de la ciudad, tanto peatones como conductores creen que ese pico y placa no ha cumplido el objetivo, por lo que un cambio a una restricción de todo el día sería un poco más afectiva.
"Puede funcionar de pronto y, en la hora pico, funciona más y contamina menos. Es que el impacto del actual no se ve, entonces, la medida uno sabe que minimiza pero realmente no se sabe hasta dónde", sostuvieron algunos ciudadanos.
Otro conductor considera que las restricciones deben ser más estrictas en algunas zonas de mayor congestión vehicular, como "la avenida Regional, la Autopista Norte y la Oriental por la construcción del Metroplús que están haciendo".
Cabe recordar que hoy no hay pico y placa para vehículos particulares y se mantendrá así al menos hasta que se termine la vacunación de los adultos de más de 60 años en la ciudad, cuando se podría aplicar la nueva restricción.