Orlando Cabrales, expresidente de Reficar, insiste en su inocencia

Orlando Cabrales Martínez, presidente de Reficar entre el 2009 y el 2012, insiste en que es inocente de las acusaciones en su contra por el millonario desfalco en la modernización de la refinería, pese a que no ha sido absuelto.

El juez 16 de control de garantías lo dejó libre porque tiene 79 años, pero con restricciones: no podrá salir del país y deberá presentarse ante las autoridades los primeros 5 días de cada mes.

Cabrales Martínez emitió un comunicado en el que asegura que, con la decisión del juez, podrá́ enfrentar el juicio en libertad. Asegura, además, que no se encontró mérito para privarlo de ella. 


A Cabrales, la Fiscalía le imputó cargos como coautor del delito de interés indebido en la celebración de contratos. Sin embargo, no aceptó los cargos.

"La Procuraduría General de la Nación ha sido clara en la audiencia, al considerar que no hubo interés indebido en la conducta de Orlando Cabrales Martínez y que no cometió́ delito alguno", dice el comunicado. 


"La Fiscalía General de la Nación nunca ha señalado que haya habido por parte de Orlando Cabrales apropiación de recursos, ni a su favor, ni a favor de terceros", añade.


Dice, además, que no participó en la elección de CB&I (firma contratista encargada de ejecutar las obras), pues el contrato con dicho contratista se firmó en 2007, y que lo mismo sucedió con el pago de facturas por 610 mil millones de pesos en 2014.

Señala que, según la Fiscalía, se pagaron por servicios que nada tenían que ver con las obras como spa, licor y alquiler de vehículos de alta gama.

Finalmente, Cabrales dice que "confía plenamente en que podrá́ demostrar en el juicio, el cual afrontará en libertad, la rectitud, adecuada gestión y transparencia de sus actuaciones, y, aspira a que se le garantice objetividad, imparcialidad y se le respeten sus derechos, como que se revise con el debido cuidado las pruebas de descargo".

Las obras para la modernización de la Refinería de Cartagena, Reficar, tuvieron sobrecostos por 610 mil millones de pesos por concepto de adiciones en los contratos, pagos de nómina exagerados, gastos que no tenían relación con las obras, entre otros.