A 7.8 metros descendió el calado en el canal navegable de Barranquilla y por eso urge retomar allí las labores de dragado que se suspendieron hace varios días por los contagios de COVID-19 que aún hoy afectan a varios tripulantes de la embarcación encargada de los trabajos de mantenimiento.
Es así como este miércoles, Cormagdalena, Findeter, la Capitanía de Puerto y representantes del sector portuario se reunirán para plantear prontas soluciones al respecto. Una de las alternativas que se pondrán sobre la mesa será reemplazar algunos tripulantes para que draguen cuanto antes.
"Ya arribaron a Barranquilla otros seis tripulantes, así que tendremos la reunión en horas de la tarde con el resto de los actores para tomar una decisión. Lo que nosotros queremos es que haya un cambio de la tripulación en la mayor brevedad porque esto no da espera", informó José Curvelo, jefe de Asuntos Portuarios de la alcaldía.
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"Estamos todos muy preocupados con la situación. Por supuesto respetamos la salud de cada uno de los tripulantes, pero hay que tomar decisiones en la inmediatez", añadió.
Curvelo aseguró que urge retomar el dragado, sobre todo, en el sector crítico de Bocas de Ceniza, ya que para finales de esta semana está programada la llegada de varios buques, cuyo calado supera el nivel autorizado actualmente en el canal de acceso al puerto de Barranquilla.
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Luego, si no mejoran las condiciones, varias embarcaciones podrían ser desviadas a otros puertos de la región, lo que representaría pérdidas económicas para la capital del Atlántico.
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