Comunidad en Cesar puso en reversa máquinas que harían exploración para fracking

Los habitantes del municipio de San Martín, en el departamento del Cesar, se volcaron en la mañana del jueves a las calles del corregimiento de Cuatro Bocas, donde el Gobierno dio un contrato a la empresa Conoco Phillips para la realización de fracturamiento hidraúlico. El objetivo era uno solo: impedir el ingreso de la maquinaria con la que la empresa va a iniciar trabajos de fracking en la zona. 

El temor y la zozobra rondó por las calles del caserío durante horas, pues hasta sus oídos llegaron advertencias de que representantes de la empresa iban a llegar en compañía del Esmad y del ejército, para forzar el ingreso. En consecuencia, los líderes empezaron a alzar su voz para convocar a defensores de derechos humanos, quienes se hicieron presentes en la zona para acompañarlos en su protesta. 

Romario Torres, líder de la comunidad, señaló que los empresarios llegaron en compañía de varios agentes de la Policía, quienes intentaron concertar con los protestantes el despeje de la vía. Pero ante la negativa de estos, los uniformados decidieron dar marcha atrás y pidieron a los de la Conoco que hicieran lo mismo, en el sentido de respetar la opinión de los ciudadanos. 

"En ese momento ingresó la patrulla de la Policía, pero todos los equipos que pretendían entrar se quedaron a unos 80 metros del lugar del plantón. Nosotros esperamos a ver si a la brava se iban a meter. El comandante de la Policía sirvió de intermediario para que hablara uno de la Conoco. La gente dijo que no entraban los equipos y la Policía mandó a que dieran reversa", contó Torres.

Luego de esto, un equipo de la Defensoría del Pueblo habló con líderes locales, quienes pusieron en conocimiento de estos una serie de hechos que catalogan como "arbitrariedades" cometidas por parte de la empresa contra el pueblo, que desde marzo está protestando contra este proyecto.