Mientras cerca de 20 voluntarios recibían la donación de medicinas y alimentos no perecederos durante la Jornada Mundial de Ayudas Humanitarias por Venezuela en un parque de Barranquilla, Delmiro González, un venezolano que habita en la capital del Altántico se enfrentaba a la guardia venezolana por la libertad de su país.
González viajó al puente Francisco de Paula Santander de Ureña, uno de los puntos desde donde se ingresarían las ayudas humanitarias hacia el vecino país.
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Este manifestante contó en exclusiva para Blu Radio detalles del momento en el que una cadena humana de mujeres intentaba persuadir pacíficamente a la guardia venezolana para facilitar el ingreso de las donaciones.
“Nosotros rompimos piquetes, alambres de púas, tanques de la guardia, era un territorio de guerra y llegamos a donde estaban las mujeres de la Policía nacional de Venezuela. Ellas entraron en llanto, ahí vimos que están igual de necesitadas que todos los venezolanos, pero lamentablemente tenían órdenes, se les notaban las ganas de querer romper la línea de la policía y muchas de ellas nos abrazaron”, contó Delmiro a esta emisora.
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González también lamentó profundamente la quema de las ayudas humanitarias que, según confirmó, ingresaron a territorio venezolano.
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Por su parte, Pilin León, presidenta de la Asociación de Venezolanos en Barranquilla, precisó durante la jornada de donaciones que esperaba acciones violentas por parte del Gobierno venezolano para evitar el ingreso de las ayudas humanitarias.