A partir de este martes 10 de agosto entraría en parálisis el sistema de transporte masivo de Barranquilla, Transmetro, ya que los dos operadores, Sistur y Metrocaribe, atraviesan una grave crisis financiera que, según ellos, los obliga a suspender el servicio.
El déficit de la pandemia para los dos concesionarios es de 24.000 millones de pesos, y cuando se le suma el que arrastraban desde antes del coronavirus, el "hueco" es de 150.000 millones de pesos.
Al respecto, el gerente de Sistur, José Emiro Picón, informó este viernes que su empresa solo cuenta con recursos para funcionar hasta el lunes.
El otro operador, Metrocaribe, suspendió el servicio desde este jueves por la huelga de sus conductores, quienes decidieron no sacar los buses a las calles porque les adeudan dos quincenas y prestaciones sociales.
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"Tenemos una coyuntura por la pandemia desde julio de 2020 a julio de 2021, por lo que necesitamos el apoyo del Distrito con 10.000 millones de pesos. Este no es un problema de concesionarios sino de la ciudad", dijo José Emiro Picón, gerente de Sistur.
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Transmetro cuenta con una flota de 190 buses, 107 de los cuales pertenecen a Sistur y 83 a Metrocaribe.
Ante este nuevo episodio que golpea el transporte en la ciudad, el alcalde de Barranquilla, Jaime Pumarejo, reiteró que Transmetro es un sistema que mueve solamente el 20% de los pasajeros y que el Distrito no puede financiarlo.
Agregó que ya los operadores han recibido auxilios por 42.000 millones de pesos durante la pandemia.
En la actualidad el sistema moviliza unos 60.000 pasajeros al día cuando está proyectado para unas 150.000 personas.
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