Luego de que el alcalde de Cali, Jorge Iván Ospina, anunciara el nuevo horario para la apertura de discotecas y venta de licor hasta las 3:00 de la mañana; las reacciones del sector público y privado de la salud en la región no se hicieron esperar.
María Cristina Lesmes, directora de salubridad en el Valle, considera que aún no era el tiempo indicado para dar esta flexibilización de las medidas.
"En el afán por recuperar la actividad económica, por incentivar la asistencia a eventos masivos en la ciudad, no se fijaron en que los indicadores de la pandemia aún no son del todo favorables. Hubieran esperado dos semanas para nivelar la situación UCI en la región. Es una decisión bastante peligrosa", indicó la funcionaria.
También desde el Sindicato de los Trabajadores Médicos temen que esta flexibilización parcial aumente considerablemente el número de casos de COVID-19.
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"Hacemos un llamado a las autoridades y la ciudadanía para que tomen conciencia y evitemos que se vuelvan a colapsar las UCI y tener la ciudad repleta de nuevos contagios", señaló Jorge Enrique Enciso, presidente de Fecolmed.
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Ambos funcionarios están de acuerdo que mientras el proceso de vacunación no llegue a la inmunidad de rebaño, todavía no pueden relajarse las medidas en Cali.
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