La agresividad con la que ataca el COVID-19 la salud de cientos de personas y la intubación a la que tienen que ser sometidos aquellos que llegan a Unidad de Cuidado Intensivo, provoca en algunos casos un daño en la laringe que solo a través de cirugía se puede reparar.
Según explica el médico Álvaro Herrera, especialista de cirugía de cabeza y cuello del Hospital Universitario de Santander, solo por COVID-19 han sido intervenidos cuatro pacientes críticos quienes lograron recuperar el habla, la deglución y la respiración.
“La misma condición de alteración de la fisiología laríngea y pulmonar y la intubación prolongada puede generar daño en la laringe y tráquea, se genera un fenómeno que se llama estenosis laríngea que no es más que el cierre completamente de la laringe lo que lleva a la persona a no poder respirar, por eso hay que recuperar el tejido dañado para que recupere nuevamente estas funciones”, señaló el médico Herrera.
La cirugía además implica un período posterior de rehabilitación para que el aparato respiratorio vuelva a la normalidad.
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“Como ha habido un desacondicionamiento, tenemos que hacer después de la operación un tratamiento, en algunos casos prolongado, de terapia para la rehabilitación”, manifestó el especialista.
Actualmente tres personas están en espera de cirugía de tráquea en el Hospital Universitario de Santander.
Una de las causas que genera la COVID-19 son las secuelas laringotraqueales. Nuestro médico especialista en cirugía de cabeza y cuello Dr. Álvaro Herrera H, nos cuenta de que se trata y hace un llamado a utilizar las medidas de bioseguridad que eviten la propagación de este virus pic.twitter.com/6vj7xpHihZ
— Hospital Universitario de Santander (@HUSantander) July 10, 2021
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