Cinco vías intermunicipales en Santander están cerradas por deslizamientos y pérdida de banca, debido a que las lluvias han debilitado los terrenos. La Gobernación departamental interviene los ejes viales con maquinaria para rehabilitar el paso.
Además del grave daño de la carretera que conduce a la provincia de Soto Norte, en el departamento, cuatro más están cerradas por deslizamientos y daños en las calzadas que impiden el paso de vehículos particulares, de transporte intermunicipal y de carga pesada.
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Los corredores inhabilitados son: el que comunica desde el municipio de Mogotes hacia San Joaquín; el que une a San Vicente con Zapatoca; el de la carretera Charalá- Enciso; y la vía que conduce hacia Tona, a dos kilómetros de la entrada principal.
El secretario de Infraestructura de Santander, Carlos Díaz Barrera, informó que la Gobernación adelanta trabajos con maquinaria para devolver la movilidad.
En la vía a Matanza y la región de Soto Norte, las autoridades confirmaron la habilitación en una carretera alterna.