El esloveno Tadej Pogacar se coronó este domingo en París como campeón del Tour de Francia 2025, sumando así su cuarto título en la 'Grande Boucle' (2020, 2021, 2024 y ahora 2025). Con esta victoria, igualó al británico Chris Froome y quedó a solo una conquista de los históricos Jacques Anquetil, Eddy Merckx, Bernard Hinault y Miguel Induráin, quienes suman cinco coronas.Aunque ya tenía asegurado el maillot amarillo desde días atrás, Pogacar no se guardó nada y peleó hasta el final por la etapa en la capital francesa, donde fue cuarto. El belga Wout van Aert (Visma-Lease a Bike) se llevó el triunfo del día, tras imponerse en solitario luego de un ataque en el último ascenso a Montmartre.Una última etapa con emoción y lluvia en ParísLa etapa de cierre volvió a la capital francesa tras un año de ausencia debido a los Juegos Olímpicos de París 2024. Esta vez, el recorrido incluyó tres pasos por el barrio de Montmartre, con una subida corta pero exigente de 1,1 kilómetros al 5,9 % de inclinación.La lluvia, que no dio tregua, obligó a los organizadores a neutralizar los tiempos a 50 kilómetros de la meta para evitar caídas. Sin embargo, eso no impidió que Pogacar intentara el doblete y que el público parisino disfrutara de una jornada festiva, con bailarinas del Moulin Rouge y hasta un pintor retratando al campeón en plena Rue Lepic.Un podio de lujo y más maillots para la vitrinaEn la clasificación general, Pogacar le sacó 4 minutos y 24 segundos al danés Jonas Vingegaard, su eterno rival. El alemán Florian Lipowitz (Red Bull-Bora) fue tercero y, además, se llevó el maillot blanco como mejor joven, siendo el primer alemán en el podio desde Andreas Klöden en 2006.El maillot verde de la regularidad fue para el italiano Jonathan Milan (Lidl-Trek), uno de los mejores velocistas del pelotón.A sus 26 años, Pogacar ya acumula 22 victorias de etapa en el Tour y sigue agrandando su leyenda. Con una sonrisa y los brazos en alto, cerró otra edición inolvidable, ya con la mirada puesta en alcanzar el olimpo de los cinco grandes campeones.
El ciclista australiano Kaden Groves (Alpecin-Deceuninck) se llevó este sábado una victoria inolvidable en la penúltima etapa del Tour de Francia 2025. Groves, especialista en los sprints y con amplia experiencia en grandes vueltas, supo aprovechar una jornada caótica marcada por la lluvia y una caída que cambió por completo el panorama.Cuando todo indicaba que Iván Romeo (Movistar) podía luchar por su primera victoria en el Tour, una curva mojada le jugó una mala pasada. El español se fue al suelo junto al francés Romain Gregoire a 21 kilómetros de la meta, justo cuando lideraban la escapada. Romeo se golpeó las costillas con un bordillo y quedó fuera de combate, abriéndole camino a Groves.Pogacar acaricia su cuarto Tour de FranciaMientras el australiano celebraba su primer triunfo en la ‘Grande Boucle’, el esloveno Tadej Pogacar entraba con tranquilidad al grupo de favoritos, siete minutos después. La general no sufrió modificaciones, y todo indica que Pogacar subirá este domingo al podio en París vestido de amarillo, consagrándose por cuarta vez campeón del Tour de Francia.La subida a Montmartre en la última jornada podría definir el triunfo de etapa, pero no se espera que altere las posiciones del podio.Tercer triunfo para el Alpecin-DeceuninckCon esta victoria, Groves suma la décima de su carrera en grandes vueltas y le entrega a su equipo, el Alpecin-Deceuninck, el tercer festejo en esta edición del Tour. Lo hizo sin la compañía de sus jefes de filas habituales, Jasper Philipsen y Mathieu van der Poel, quienes abandonaron la carrera días atrás.A sus 26 años, Groves demostró que también puede brillar en solitario, en una etapa que lo consagra como uno de los nombres propios de esta edición del Tour.
Menos de una semana después de su victoria en Superbagnères, el neerlandés Thymen Arensman (Ineos) se pellizcaba en la cima de La Plagne, bajo la intensa lluvia alpina, no se creía su segundo triunfo en el Tour en el año de su debut, además ante "los extraterrestres" Tadej Pogacar y Jonas Vingegaard."No me doy cuenta de lo que acabo de hacer", fue lo primero que dijo Arensman en La Plagne, donde se convirtió en el sucesor de su compatriota Michael Boogerd, quien alzó los brazos en la misma cima hace 23 años."Estoy destrozado. No lo puedo creer. Ganar una etapa ya era increíble. Eso ocurrió desde la escapada, pero hoy lo conseguí contra los corredores de la general, los más fuertes del Tour. Parece un sueño. He ganado a dos extraterrestres", dijo emocionado.Arensman llegó al pie de La Plagne con su compañero Tobias Foss, pero luego el noruego cedió y dejó al neerlandés a solas con los grandes monstruos de la general."En la subida lo tenía todo bajo control y pensé que los favoritos iban a marcarse entre sí. Tadej y Jonas son prácticamente extraterrestres, los ciclistas más fuertes del pelotón. Y quiero vencerlos como un mortal. No puedo creer que lo haya logrado. Es una locura", concluyó.Humano contra extraterrestres "Se trata de Tadej y Jonas. Todo el mundo sabe que son los mejores del mundo, casi unos extraterrestres, y yo soy sólo un ser humano. Pero acabo de ganarles, es una locura", añadió.Luego de haberse escapado al inicio de la subida final, el escalador de 25 años no contó con más de medio minuto de margen, pero le resultó suficiente para no ser alcanzado en ningún momento por la dupla Pogacar-Vingegaard.¿Pero hubiera logrado esa victoria si Pogacar se hubiese mostrado más ambicioso? La misma pregunta fue formulada al esloveno en conferencia de prensa. "No lo sé, yo contaba los kilómetros para el final. Arensman iba fuerte, bravo por él. Yo imprimía un ritmo defensivo en el que estaba cómodo y que me permitía responder a un eventual ataque".Pogacar añadió que el protocolo del maillot amarillo le está haciendo mella, y que es difícil "estar concentrado y motivado cada día".Bajo una intensa lluvia, en una etapa que resultó menos emocionante de lo esperado, los dos hombres que se reparten las cinco últimas ediciones del Tour se vigilaron mutuamente en la subida a la estación de esquí alpina, antes de que el danés esprintase en los últimos metros previos a meta en busca de un honor más moral que práctico de cara a la general.Pogacar se mostró más conservador de lo que en él es habitual, o quizá con menos fuerzas de las que presentó en la primera mitad de la carrera. 'Pogi' se limitó a defender su ventaja, mientras que Vingegaard también pareció resignado a su segundo puesto en la general.
La decimonovena etapa del Tour de Francia, prevista para este viernes entre Albertville y La Plagne, tuvo que ser acortada y no pasó por el Col des Saisies, debido a un brote de dermatosis nodular contagiosa detectado en un rebaño de vacas.La medida, que podría implicar el sacrificio de los animales afectados, fue anunciada por los organizadores la noche del jueves."El descubrimiento de un brote de dermatosis nodular contagiosa en un rebaño situado en el Col des Saisies ha obligado a sacrificar a los animales", anunció ASO, la empresa organizadora del Tour."Ante la angustia de los ganaderos afectados y para preservar la serenidad de la carrera, se ha decidido, de acuerdo con las autoridades, modificar el recorrido de la 19ª etapa Albertville-La Plagne y no atravesar el Col des Saisies", agregó ASO.La etapa solo cubrió 95 kilómetros en lugar de los 129,9 km previstos inicialmente.La salida ficticia se mantuvo en Albertville, como estaba previsto, pero se retrasó alrededor de una hora. A continuación, la carrera retomó su recorrido original poco antes de Beaufort, en el kilómetro 52,4 de la ruta inicialmente prevista, precisó la organización.Ganador de esta recortada etapaEl neerlandés Thymen Arensman se impuso este viernes en la última etapa de montaña del Tour, con final en La Plagne, superando por apenas dos segundos a Jonas Vingegaard y a Tadej Pogacar, que sale de los Alpes con el cuarto título muy encarrilado.Fue el segundo triunfo parcial para Arensman en este Tour, después de haberse llevado otro final en alto, en Superbagnères en la 14ª etapa, en los Pirineos.Luego de haberse escapado al inicio de la subida final, el escalador de 25 años no fue alcanzado en ningún momento por la dupla Pogacar-Vingegaard.
El danés Jonas Vingegaard aceptó la derrota en el Tour de Francia y afirmó que el esloveno Tadej Pogacar lo merece porque "es el más fuerte"."Ha sido el más fuerte, merece ganar. Hay un momento en el que tienes que aceptarlo y lo acepto", aseguró el ciclista del Visma tras la última etapa de alta montaña.Vingegaard, que tiene casi cuatro minutos y medio de desventaja, dijo que en esta jornada, con meta en la cima de categoría especial de La Plagne, ya no intentó restar tiempo a Pogacar y que su único objetivo era sumar una victoria de etapa."Para ser honesto, lo que perseguía era la victoria de etapa. Desgraciadamente Thymen Arensman ha hecho un buen trabajo y ha merecido ganar, ha sido muy fuerte. En el final no intentaba recuperar tiempo sobre Tadej. Desgraciadamente no he podido ganar", señaló.Einer Rubio: "Teníamos que jugárnosla de salida"El colombiano Einer Rubio se mostró satisfecho de haber intentado ganar la decimonovena etapa del Tour de Francia con una escapada temprana que no pudo llevar hasta el final."Teníamos que jugárnosla de salida, hacer la primera subida muy rápido, pero no ha sido posible. Nos ha llegado el grupo de favoritos por detrás. Pero, bueno, lo hemos intentado y estoy satisfecho por ello", aseguró el corredor de Movistar.Rubio aseguró que la etapa de la víspera fue más dura, pero la de La Plagne tampoco fue fácil: "Pero estamos acostumbrados a guerrear"."Sabía que hoy sería una batalla, porque recortaron la etapa y sería muy explosiva. Todo el mundo se motiva y pasan estas cosas", agregó en alusión a la mutilación del recorrido final en 36 kilómetros y dos puertos por un brote de "dermatitis nodular contagiosa" que afectó al ganado en la zona del Col des Saisies y que obligó al sacrificio de los animales. Por cuestiones de seguridad, se acordó el desvío del recorrido.
El esloveno Tadej Pogacar consideró que tuvo "una buena jornada" en la que fue segundo y acrecentó su ventaja en la general y señaló que los ataques del Visma del danés Jonas Vingegaard "no sirvieron para nada".El corredor del UAE consideró que el Tour todavía no está ganado y advirtió de que queda la jornada de mañana, que auguró muy dura."Veremos qué pasa mañana, es otro día muy duro. Si la etapa es como la de hoy estoy más tranquilo porque el equipo ha estado muy fuerte. El Visma lo ha intentado todo, pero no les ha servido para nada, mis compañeros me han defendido bien, hemos estado muy cohesionados", señaló el campeón del mundo."Mañana correremos con el mismo planteamiento, buscando también sobrevivir, igual que hoy. Puede que busquemos la victoria en la etapa de los Campos Elíseos", afirmó.El esloveno indicó que no la buscó en la Loze, un puerto donde hace tres años sufrió mucho, porque se subió por una vertiente diferente a la de 2022, menos dura."La otra vertiente es más dura, me gustaría pronto poder afrontar una etapa por esa vertiente, entonces sí iré a buscar la victoria. Hoy era más fácil, aunque es dura, pero la otra es peor", comentó."Hoy era difícil sacar ventajas, pero estoy contento de seguir de amarillo y de haber sacado algo de renta, ha sido un buen día", dijo.
El esloveno Tadej Pogacar chocó sin gravedad con un coche del Visma, equipo de su rival Jonas Vingegaard, mientras se dirigía a la salida de la 17ª etapa del Tour de Francia, este jueves en Vif."Íbamos hacia la línea de salida en medio de coches, no había peligro por delante. Íbamos detrás del coche (de la formación Visma), quizá un poco demasiado cerca, y el conductor frenó de repente. No sé si lo que quería era controlar mis frenos", bromeó el maillot amarillo para la televisión británica antes de la salida."No vi por qué pegó el frenazo (...) pero todo va bien", tranquilizó el esloveno de 26 años, que pudo tomar sin problemas la salida de la etapa reina del Tour de Francia en los Alpes.En el programa: tres puertos de categoría especial, entre ellos el temible col de la Loze, donde Tadej Pogacar vivió uno de sus peores días como corredor, en 2023.Pogacar lidera la general con más de cuatro minutos sobre el danés del Visma Jonas Vingegaard.O'Connor gana en la Loze, Pogacar anula la estrategia del VismaEl australiano Ben O'Connor (Jayco AlUla) se impuso este jueves en solitario en una de las etapas reinas, con llegada en el puerto de la Loze, de categoría especial.En la pelea por la general, el maillot amarillo salió indemne, e incluso reforzado, de las maniobras del Visma de Jonas Vingegaard, al que se le agotan el tiempo y los kilómetros para un cada vez más improbable vuelco en la general.El colombiano del Movistar Einer Rubio fue adelantado a unos metros del final por Pogacar (2º en meta), que amplió su ventaja al frente de la general en otro puñado de segundos.Luego de haber dejado aislado a 'Pogi' en el col de la Madeleine -segundo puerto de categoría especial del día-, Jonas Vingegaard no tuvo fuerzas para sacar provecho de esa ventaja numérica, y vio cómo varios compañeros de 'Pogi' en el UAE, entre ellos el ecuatoriano Jhonatan Narváez, contactaban con el grupo principal.Finalmente el maillot amarillo demarró para sacar 9 segundos en meta al danés, al que saca 4 minutos y 26 segundos en la general.
El ciclista colombiano Santiago Buitrago dijo este miércoles a la AFP que se encuentra mermado físicamente en este Tour de Francia pero, después de haber sido tercero en la etapa del martes, espera "dar lo mejor" en las jornadas que quedan hasta la meta final del domingo."Quedan dos etapas en las que todavía se puede esperar algo y espero seguir sacándole el máximo a mi cuerpo. No estoy al 100 %, pero intento dar lo mejor", declaró el corredor del Bahrain en la salida de Bollène, antes de una 17ª etapa que conduce al pelotón hasta Valence.El Tour de Buitrago quedó muy condicionado en la etapa con final en Muro de Bretaña, la séptima de esta edición, el pasado 11 de julio. Allí se vio implicado en una fuerte caída cerca del final y cruzó la meta con el maillot rasgado y heridas visibles."No ha sido para nada el Tour que esperaba. Venía con otras ilusiones y otros objetivos. Después de la caída todo ha cambiado bastante", admitió.El martes, Buitrago (25 años) consiguió un meritorio tercer puesto en la 16ª etapa, con meta en alto en el Mont Ventoux, a solo 4 segundos del francés Valentin Paret-Peintre y del irlandés Ben Healy, primero y segundo del día respectivamente."Lo de ayer es simplemente eso, el querer sacar algo bueno después de todo", explicó Buitrago en su charla con la AFP.En la general empezó la 17ª etapa como 46º, a casi dos horas del líder Tadej Pogacar y a una hora y 50 minutos del podio, por lo que su objetivo en los días que quedan es dar alguna alegría a su equipo y a su país en las etapas de montaña.
Un hombre fue interceptado por un policía y por un miembro de la organización del Tour de Francia cuando buscaba cruzar en bicicleta la línea de meta de la 17ª etapa, justo antes de la llegada de los corredores este miércoles a Valence, según constataron fotógrafos de la AFP.El incidente, que no fue difundido por televisión, tuvo lugar apenas unos minutos antes del esprint final.El hombre, con casco negro y maillot del equipo francés Decathlon-AG2R La Mondiale, fue derribado sobre el asfalto de forma contundente.En las fotos de la AFP se puede reconocer también al hombre encargado de las llegadas, empleado de la empresa organizadora del Tour, ASO, quien había placado a un militante propalestimo en la meta de la 11ª etapa el pasado miércoles en Toulouse.Por el momento, ASO no ha emitido ningún comentario para explicar los hechos.Así terminó la etapa 17Sin el belga Tim Merlier o el eritreo Biniam Girmay, descartados tras una caída a 800 metros de meta, fue Jonathan Milan el que se llevó la victoria al esprint este miércoles en la 17ª etapa del Tour de Francia.El coloso italiano del Lidl-Trek, de 1,96 metros de altura, se embolsó 50 puntos que refuerzan su maillot verde y le despejan el camino para poder vestir en París el domingo la túnica que premia al corredor más regular en las llegadas y en los esprints intermedios.La lluvia, presente en los últimos 40 kilómetros de etapa con salida en Bollène, fue protagonista en el final en Valence, causando una caída en la que se vieron implicados varios hombres llamados al menos a obligar a un esfuerzo extra a Milan para llevarse su segunda victoria de etapa en este Tour.Aunque ninguno pareció haber sufrido daños que le impidan continuar la carrera, la llegada final perdió espectacularidad en tanto en cuanto dejó casi sin rivales a Milan.Al término de la etapa, el esloveno Tadej Pogacar conservó su holgado maillot amarillo en la víspera de la etapa reina en los Alpes.
Ante las acusaciones de arrogancia y los reproches por un dominio tan acentuado en el Tour de Francia, el maillot amarillo Tadej Pogacar aseguró este miércoles que su equipo no hace nada "para resultar arrogante", sino que trata simplemente de "hacer fácil la carrera"."La arrogancia es una cosa, tratar de ganar el Tour de Francia es otra", estimó el esloveno, cuyo equipo suma cinco triunfos de etapa y parte con todo a favor para conquistar el Tour.El martes se alzaron voces críticas, como la del director del TotalEnergies Jean-René Bernaudeau o del comentarista y exciclista Thomas Voeckler, que censuraron el comportamiento de Nils Politt, el compañero alemán de Pogacar, que reprendió a varios corredores que trataban de formar una escapada camino del Mont Ventoux.Un intento de intimidación finalmente infructuoso: unos kilómetros más adelante se formó una fuga de 34 corredores, de la que salió el vencedor de etapa, el francés Valentin Paret-Peintre."Muchos corredores pueden vernos como arrogantes, como ayer, cuando tratamos de calmar las cosas, porque somos el equipo que debe controlar cada kilómetro de esta carrera", afirma "Pogi".Las críticas arreciaron los últimos días luego de la exhibición de Pogacar en los Pirineos y la de su compañero Tim Wellens en Carcasona, victorioso después de una escapada, reprochando la voracidad de victorias de la formación emiratí."Tenemos que ver las cosas desde nuestra óptica, tratamos de no ser arrogantes, tratamos de hacer la carrera lo más fácil posible", añadió el triple ganador del Tour."Creo que algunos chicos deberían calmarse, en mi opinión, y puede parecer superarrogante decir eso, pero bueno...", concluyó.
El esloveno Tadej Pogacar (UAE) logró este sábado la consolación de un triunfo de etapa, al imponerse en la penúltima jornada del Tour de Francia, en la que el danés Jonas Vingegaard (Jumbo) se aseguró la victoria final.Vingegaard logró la tercera plaza en esta etapa de montaña, en la que el austríaco Felix Gall (AG2r Citroen) fue segundo, en un grupo de cinco escapados, que completaron los hermanos Simon Yates (Jayco) y Adam Yates (UAE).Al danés solo le falta el trámite de la última etapa, el domingo con llegada a los Campos Elíseos, para confirmar su segundo triunfo en el Tour, tras haber ganado también el año pasado.A Pogacar solo le quedaba el objetivo de lograr una segunda victoria de etapa, tras haberse impuesto en la sexta, venciendo en esta jornada de 133,5 km entre Belfort y Le Markstein, con seis puertos de montaña, los dos últimos de primera categoría.Suscríbase a nuestro canal de WhatsApp aquí:👉🏻 bit.ly/42ZQznFEl esloveno, gracias a la bonificación de su primer puesto, sin posibilidades de arrebatar la victoria final a Vingegaard, queda a 7 minutos y 29 segundos del danés.El gran perdedor de la jornada fue el español Carlos Rodríguez (Ineos), en su primera participación en el Tour, con 22 años, que buscaba el podio, pero no solo no lo logró, sino que perdió su cuarta plaza.Adam Yates conservó su tercer puesto, a 10:56 de Vingegaard, mientras que su hermano Simon subió al cuarto lugar, a 12:23 del danés.Carlos Rodríguez, que tuvo una dura caída a 97 km de la meta, en la que llegó a sangrar de la ceja izquierda, fue duodécimo en la jornada, a 58 segundos de Pogacar, con lo que termina al final en quinta posición, a 12:57 de Vingegaard, en un debut en la Grande Boucle en el que ganó la decimocuarta etapa.Otro español, Pello Bilbao (Bahrain), que también ganó una etapa, la décima, mantuvo en esta jornada su sexta plaza en la general, a 13:27 del escandinavo.Bilbao concluyó octavo en la etapa, a 33 segundos del esloveno, pero no pudo desbancar de la quinta posición a Rodríguez, del que le separaban 49 segundos antes de la jornada.Le puede interesar:
Si hay una opción de que el Tour recupere suspenso, pasa por una etapa trepidante, llena de argumentos de ataque, en constante subida y bajada y con nerviosismo hasta el final.Ese es el escenario que propone la penúltima jornada de la ronda gala, antes del paseo triunfal del maillot amarillo por los Campos Elíseos, en una jornada corta, de 133,5 kilómetros con 3.600 metros de desnivel entre Belfort y Le Markstein. Sin un momento de reposo, tras haber recorrido ya tres semanas de dura pelea en uno de los Tours más rápidos de la historia.Parece la única forma de que cobre aliciente una carrera que parece ya decidida. Con el líder, el danés Jonas Vingegaard, asentado en una renta de 7.35 minutos sobre el segundo, el esloveno Tadej Pogacar, el tercer puesto, que el británico Adam Yates ostenta solo con 1.16 frente al español Carlos Rodríguez, parece el último resquicio para el duelo.Aunque el paso por el Jura, el quinto macizo, tras Pirineos, el Central, los Vosgos y los Alpes, tiene material suficiente para alimentar todos los fantasmas.¿Y si Pogacar se lanza a un todo o nada contra el líder que le ha dominado durante las tres semanas anteriores?Apenas seis kilómetros después de la salida, las bicicletas comenzarán a escalar el Ballón de Alsacia, un puerto de segunda que tiene un lugar de privilegio en la leyenda del Tour, porque durante años, desde 1905, fue la principal dificultad montañosa de una carrera que tardó algo más en aventurarse a cotas más duras en Alpes y Pirineos.Son 11,5 kilómetros al 5,2 % que servirán de aperitivo para lo que espera. Apenas acabado su descenso y tras atravesar una zona escarpada, el Col de la Croix des Moinats, también de segunda, se encadena con el Grosse Pierre, de la misma categoría, y con el Schlucht, de tercera.Difícil controlar el pelotón en una zona de constantes toboganes, con una bajada sostenida hasta el pie del Petit Ballon, el primero de los dos colosos de la jornada, las últimas rapas del Tour de 2023.Sus 9,3 kilómetros al 8,1 % ofrecen un paisaje cuya dureza es comparada a la de Alpe d'Huez, porque no ofrece ningún centímetro de reposos y una sinuosa y serpenteante carretera, una perfecta rampa de lanzamiento de ataques antes de que se lancen a una peligroso descenso que lleva hasta el Col de Platzerwasel, que se ascenderá por cuarta vez y que aparece como el último recurso.Sus 7,1 kilómetros al 8,4 % de desnivel medio, el col lleva marcados los nombres de los españoles Jesús Aranzábal, que lo coronó en cabeza camino de la meta en el Ballon de Alsacia en 1967 y Joaquín Purito Rodríguez, el primero en pasar por su cima en 2014 en una etapa que terminaba en La Planche des Belles Filles.En esta ocasión, la pancarta del puerto está a ocho kilómetros escarpados para la meta de Le Markstein Fellering, donde al final el Tour ya podrá bajar los brazos, descansar y mirar con calma la general que será la que, tras el protocolo de los Campos Elíseos, entre en la historia de la carrera.Etapa 20: Belfort - Le Markstein Fellering, 133,5 kmSalida: 13.45 horas (11.45 GMT)Llegada prevista: 17.05 horas (15.05 GMT)Montaña:Ballon de Alsacia (2a), 11,5 km al 5,3 % a 109,5 de metaCroix des Moinats (2a), 5,2 km al 7 %, a 77 de metaCol de Grosse Pierre (2a), 3,2 km al 8 %, a 68,6 metaCol de la Schlucht (3a), 4,3 km al 5,4 %, a 54,1 de metaPetit Ballon (1a), 9,3 km al 8,1 %, a 25,3 de metaCol de Platzerwasel (1a), 7,1 km al 8,4 %, a 8,2 de meta.Le puede interesar:
El esloveno Tadej Pogacar no descartó atacar este sábado para dar la vuelta a la clasificación general del Tour, en la que tiene un retraso de 7.35 minutos con el danés Jonas Vingegaard, y aseguró que, como mínimo, buscará la victoria de etapa."Veremos si podemos intentar algo mañana. Tenemos varios planes, pero lo que es seguro es que vamos a intentar ganar la etapa, aunque hay otros muchos corredores que buscarán hacerlo. Dependerá de las fuerzas", indicó el ciclista del UAE.Pogacar afirmó que se está recuperando del desfallecimiento que sufrió en el Col de la Loze y señaló que en caso de lograrlo no se pone barreras."Espero haberme recuperado y encontrar las fuerzas, voy a intentar dar el máximo, pero será muy duro. Lo viene siendo estos últimos días, pero hay que intentar todo hasta París", dijo.El esloveno aseguró que no conoce los puertos del Jura que se ascenderán este sábado, pero señaló que ha hablado con su novia Urska Zigart, que los ascendió en una etapa del Tour femenino del año pasado."Espero tener las mismas fuerzas que tuvo ella", afirmó el vencedor de las ediciones de 2020 y 2021.Pogacar se congratuló de la victoria en la etapa 19 de su compatriota Matej Mohoric: "Es bonito ver ganar a un amigo y compatriota, sobre todo cuando tiene la clase y la elegancia de él".Le puede interesar:
El esloveno Matej Mohoric (Bahrain) se impuso este viernes en la decimonovena etapa del Tour de Francia, al ganar en el esprint a sus dos compañeros de escapada, el danés Kasper Asgreen (Soudal), vencedor de la etapa del jueves, y el australiano Ben O'Connor (AG2r Citroen), que le siguieron por este orden.Los organizadores tuvieron que recurrir a la foto-finish para dilucidar quién había ganado entre Mohoric y Asgreen, siendo al final el esloveno el que se llevó la victoria, logrando su tercer triunfo de etapa en el Tour, tras haber ganado dos en 2021.En esta jornada de transición, la segunda llana, de 172,8 km, tras las cuatro etapas alpinas, el danés Jonas Vingegaard conservó el maillot amarillo con su cómoda ventaja de 7:35 sobre el esloveno Tadej Pogacar (UAE).Tanto Vingegaard como Pogacar entraron con el grueso del pelotón, a 13:43 de los tres escapados.El sábado, el Tour afrontará la vigésima y penúltima etapa, en los Vosgos, con seis puertos, con los dos últimos de primera categoría, los ciclistas lucharán por acompañar en el podio a un Vingegaard al que no se le puede escapar la victoria final.Mohoric, Asgreen y O'Connor entraron destacados, tras alcanzar a 29 km de meta a otro escapado, el belga Victor Campenaerts (Lotto Dstny), también presente en la escapada del día anterior.Tras los tres fugados, llegó un grupo de nueve ciclistas, a 39 segundos, encabezados por el belga Jasper Philipsen (Alpecin), que en caso de que el pelotón hubiese llegado agrupado, habría tenido muchas posibilidades de haberse hecho con el quinto triunfo de etapa en este Tour.Le puede interesar
Tras cinco etapas de dura batalla en el Jura y, sobre todo, en los Alpes, y de sensaciones fuertes, el Tour de Francia recupera la calma con el regreso del terreno llano en la primera de las dos etapas de transición, que está diseñada para que los "sprinters" busquen la victoria.Los 184,9 kilómetros entre Moûtiers y Bourg-en-Bresse, totalmente planos, sacan a la carrera del macizo alpino y ponen dirección al norte, donde el sábado se dirimirá, en los Vosgos, el último día importante de la carrera.Los organizadores han evitado en esta ocasión cualquier dificultad montañosa que la ruta pusiera a su alcance e, incluso, se tomará un túnel para no ascender el Mont du Chat.Suscríbase a nuestro canal de WhatsApp aquí:👉🏻 bit.ly/42ZQznFEl final es en ligero descenso y la entrada a Bourg-en-Bresse por amplias avenidas con una larga línea recta que favorecerá la máxima velocidad.Todo calculado para favorecer una llegada masiva que permita a los "sprinters" que han sobrevivido a la alta montaña disputarse una nueva etapa.Entre ellos destaca el belga Jasper Philipsen, que se ha impuesto en cuatro de los cinco "sprint" de esta edición.El maillot verde de la regularidad ha visto como los Alpes eliminaban de su ruta a algunos rivales, el último el alemán Phil Bauhaus, dos veces segundo y una tercero, que se bajó de la bicicleta durante la etapa 17.Antes lo habían hecho el australiano Cabel Ewan, el neerlandés Fabio Jakobsen o el británico Mark Cavendish.Entre los principales rivales de Philipsen están el danés Mads Pedersen, el único que ha conseguido batirle al "sprint" en este Tour, el belga Woud van Aert, que suma ya cuatro podios, el neerlandés Dylan Groenewegen, segundo en Moulins, el eritreo Biniam Grimay, tercero en Burdeos o el francés Bryan Coquard, dos veces cuarto.Puede ver:
El danés Jonas Vingegaard, que este miércoles dejó casi sentenciado el Tour de Francia, tuvo que salir al paso de las sospechas de dopaje que pesan sobre él tras las dos exhibiciones consecutivas que ha firmado en la ronda gala."Para mi es difícil decir algo más, comprendo que es duro para la gente confiar en el ciclismo a causa del pasado que tiene, pero ahora todo el mundo lo practica de forma diferente de hace 10 años. No tomo nada y no tomaría nada que no daría a mi hija", aseguró el corredor danés.En la caravana del Tour de Francia sorprendió mucho la contrarreloj que hizo este martes, donde mejoró ampliamente el mejor crono que habían previsto los organizadores.Sin que nadie se atreva a decirlo en voz alta, la actuación del danés ha reavivado las sospechas en un deporte que no termina de quitarse la losa del dopaje.Suscríbase a nuestro canal de WhatsApp aquí:👉🏻 bit.ly/42ZQznFEl director del Tour, Christian Prudhomme, consideró legítima la duda, pero recordó que el ciclismo se somete a controles independientes y que el maillot amarillo no pasa un día sin ser testado.De hecho, tras la contrarreloj, todos los corredores de su equipo y los del UAE de Tadej Pogacar fueron sometidos a controles sanguíneos antes del inicio de la etapa 17.Vingegaard responde apesadumbrado a las sospechas, pero mantiene su discurso monótono.Cuando le recuerdan que su ritmo iguala el de los años más oscuros del ciclismo, el danés responde que es a causa de las mejoras en el material y en la preparación de los corredores.Sus gestas quedan algo ensombrecidas por esa sospecha, pero Vingagaard va camino de conseguir su segundo Tour consecutivo tras haber noqueado de nuevo a uno de los mejores ciclistas del momento, Pogacar.Aunque el frío danés no quiso dar por finiquitado el Tour, que afronta con 7.35 de ventaja a falta de tres etapas antes del paseo triunfal por los Campos Elíseos, el optimismo se dejaba ven en su rostro.Aunque ni con esas se olvidó de su eterno rival, al que todavía da opciones de resucitar, tras el desfallecimiento que sufrió en el Col de la Loze."Estoy aliviado, tener más de 7 minutos de ventaja es formidable. Pero todavía no estamos en París, quedan etapas peligrosas, tengo que seguir haciéndolo lo mejor posible", señaló el ciclista del Jumbo."Pogacar no abandona nunca, va a intentar algo, estoy convencido. Tengo que estar preparado. Todavía quedan por delante etapas muy peligrosas", señaló el danés, que va camino de conseguir su segundo Tour consecutivo."He luchado contra él todo el Tour. Teníamos un plan y ha funcionado bien. No es bonito para Tadje perder de esta manera, pero nosotros miramos nuestra carrera, estoy contento de tener el maillot amarillo un día más", aseguró.Vingegaard aprovechó para lanzar un dardo a su rival, del que dijo que "puede que haya hecho esfuerzos que le han hecho vulnerable, a veces se dejan energías en esfuerzos inútiles".Todo sonríe al danés, al que solo resta superar una reválida, la penúltima etapa, una cita en la alta montaña de los Vosgos, que afronta con todas las cartas en su mano para ganar, a sus 26 años, su segundo Tour.El danés no abandona el discurso oficial de su equipo, una sucesión de conceptos cerrados que repite una y otra vez."Trabajamos la táctica desde hace tiempo, todo se planifica en diciembre. Después del resultado de ayer, mantuvimos el plan previsto. Creemos en nuestra estrategia y buscamos seguirla", asegura."Creemos siempre en nosotros, no podemos influir en lo que hace Pogacar, solo podemos fiarnos de nuestro plan", dijo.Un plan perfecto, en el que solo descuadra la sombra de la sospecha que arrastra su equipo. Puede ver:
El esloveno Tadej Pogacar aseguró estar "extremadamente decepcionado" por el desfallecimiento que sufrió en la décimo séptima etapa del Tour de Francia, que le aparta de la lucha por el maillot amarillo que mantenía con el danés Jonas Vingegaard."No se lo que me ha pasado, llegué abajo totalmente vacío. Me he alimentado bien pero no ha llegado a las piernas. Estoy extremadamente decepcionado, no he podido luchar todo lo que quería", aseguró el ciclista del UAE, que tras perder casi 6 minutos está ahora a 7,35 del líder.El esloveno señaló que ahora buscará recuperarse de la "pájara" del día y que tratará de ganar la etapa del sábado, la última cinta con la montaña, en los Vosgos."Si me recupero de lo de hoy buscaré la victoria. Quiero ofrecérsela al equipo", indicó.Agradeció a sus compañeros haber podido terminar la etapa y conservar el segundo puesto de la general, al tiempo que su compañero Adam Yates afianzó el tercero.El corredor atribuyó a la "mala suerte" la caída que sufrió en el ascenso al primer puerto de la jornada."La escapada se formaba, estaba entre los primeros, pero el de delante ha frenado y ha cambiado la trayectoria. He tocado su rueda y me he caído. No sé bien qué ha pasado", indicó. Puede ver:
El danés Jonas Vingegaard confesó sentirse "aliviado" por la ventaja que tiene ahora en la general del Tour de Francia, tras el desfallecimiento del esloveno Tadej Pogacar en la etapa 17.
El austríaco Felix Gall culminó en la meta de Courchevel, la última etapa alpina del Tour de Francia, una larga escapada consiguiendo la victoria más importante de su carrera, mientras el danés Jonas Vingegaard afianzó su victoria en el Tour tras el derrumbe del esloveno Tadej Pogacar.El español Carlos Rodríguez se alejó del tercer puesto tras ceder 1.11 con respecto al británico Adam Yates, a falta de una gran etapa de montaña.Pero la noticia fue la pájara de Pogacar, vencedor de las ediciones de 2020 y 2021, que un día después de perder 1.38 en la contrarreloj sufrió un desfallecimiento en le ascenso al Col de la Loze y entró en meta con más de 5 minutos de retraso sobre el maillot amarillo, al que ahora tiene a 7.35.El corredor del UAE, de 24 años, dijo así adiós a la pelea por ganar su tercer Tour y en un momento dio órdenes a su equipo de que trabajaran para que Yates pudiera acabar tercero en París.El británico hizo los deberes y afianzó su puesto en el podio en el que ahora tiene un margen de 1.16 con respecto a Rodríguez, que no pudo seguir el ritmo de los mejores en el ascenso a la Loze, pese a que había puesto a trabajar a su equipo en los primeras rampas de ese puerto.El ciclista del Ineso, de 22 años, había cedido el tercer puesto a Yates en la crono de este martes y en la última etapa alpina se le alejó un poco más.La victoria de la etapa fue para Gall, de 25 años, debutante en el Tour, que había sido tercero en la primera etapa pirenaica, con final en Laruns, y que se distanció del resto de los escapados en el col de la Loze, el último de la jornada, que coronó en cabeza antes de lanzarse a un frenético descenso hasta la meta de la etapa 17.Perseguido por el británico Simon Yates, el corredor del AG2R consiguió una renta en meta de unos 20 segundos.El otro gemelo de los Yates se coloca quinto de la general a solo 18 segundos de Rodríguez.El primer español en meta fue Pello Bilbao, que ahora está sexto de la general a 31 segundos de Yates.Le puede interesar: