Un juez de control de garantías de Neiva dejó en libertad a la mujer de 35 años que fue capturada en flagrancia por quemar con una cuchara a sus dos hijas de 7 y 8 años, como castigo por haber cogido unas monedas.
“Las menores manifestaron haber sido castigadas por su progenitora colocando en las manos una cuchara caliente por haber cogido unas monedas”, señaló el mayor Luis Felipe Duran, comandante operativo (e) de la Policía Metropolitana.
Durante la audiencia, la Fiscalía le imputo a la mujer los delitos de violencia intrafamiliar agravada y lesiones personales dolosas. Aunque quedó en libertad, seguirá vinculada al proceso.
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Según se pudo establecer, las menores presentaron graves quemaduras de segundo grado en sus manos.
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“Las niñas presentaron quemaduras de segundo grado y están a la espera de la valoración por cirugía plástica para definir el procedimiento que requieren”, indicó el intendente Germán Barón, integrante de Infancia y Adolescencia de la Policía Metropolitana.
Las pequeñas quedaron bajo custodia y cuidado del ICBF para el restablecimiento de sus derechos.
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