Incendio consume cerca de 450 hectáreas de bosque y cultivos en Atlántico

La temporada seca, por la que el Ideam mantiene la alerta roja hace una semana en la región Caribe, ya ha ocasionado 116 incendios forestales en el Atlántico. La conflagración de mayor magnitud se registró en la población de Luruaco, en límites con el municipio de Repelón, hacia el sur del departamento.

De acuerdo con Duván Verdeza, secretario de Umata y de la Oficina de Atención y Prevención del Riesgo de Desastres de Luruaco, se está adelantando el censo de los productores afectados, pues las llamas consumieron cultivos de yuca, guandul, frijol y ajonjolí.

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"Visualizamos que se perdieron entre 400 y 450 hectáreas de tierra, entre bosque nativo y cultivos que ya estaban casi en cosecha. De los cuatro cultivos que estaban allí se perdió cerca del 60 por ciento", detalló el funcionario.

Las autoridades no descartan que estos incendios forestales se desaten por la irresponsabilidad de los mismos productores que hacen quemas para luego sembrar sus cultivos, sin prever que las llamas se salen de control por las altas temperaturas y los fuertes vientos que superan los 65 kilómetros por hora.

"Insistimos en el llamado a la comunidad, tanto urbana como rural, para que tome conciencia y evite quemar basura o realizar supuestas quemas controladas para adecuar la tierra, porque terminan en incendios como estos, que hacen un gran daño a la economía de la región", agregó Verdeza.

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A orillas de las carreteras también se han registrado incendios producto de las brisas que revientan los cables de energía, hacen cortocircuito y prenden el pasto.

El incendio forestal atendido en Luruaco se suma al registrado la noche del martes en el corregimiento de Chorrera del municipio de Juan de Acosta donde el fuego consumió 12 hectáreas de pasto.