Este miércoles, Juan Pablo Mosquera se declaró culpable ante una corte federal de Miami de haber traicionado a la Drug Enforcement Administration (DEA).
Mosquera, quien fuera capitán de la Policía de Colombia, trabajó como supervisor en Cali de la SIU o “Unidad de investigación sensible” destinada a ayudar a la DEA en la lucha contra el narcotráfico.
Estas unidades son creadas en diferentes países de la región como parte de los esfuerzos trasnacionales para combatir este flagelo.
Según la investigación recogida por el periodista Josh Goodman de la agencia de noticias internacional AP, el uniformado habría compartido información importanterelacionada con la unidad con un hombre llamado Juan Carlos Dávila-Bonilla, también de origen colombiano, con historial criminal en Italia y Alemania por distribución de cocaína.
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Pero fueron agentes de la DEA los que identificaron las intenciones de los dos hombres para vender información y favorecer a otros delincuentes. Algo que fue confirmado por otras fuentes involucradas en el proceso.
Un dato falso y una llamada fueron algunos de los muchos de los elementos que documentó la DEA para determinar la responsabilidad de Mosquera.
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En el reportaje de AP, se destaca el futuro prometedor dentro de la Policía Nacional del capitán Mosquera y que fue interrumpido por esta situación.
Sobre Mosquera, que fue detenido en 2018 y extraditado, pesan dos cargos de obstrucción a la justicia.
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