La compañía espacial estadounidense Blue Origin, fundada por el millonario Jeff Bezos, aplazó el despegue de su cohete New Shepard por motivos técnicos, pero anunció que volverá a intentarlo a lo largo de la semana.

El lanzamiento no pudo realizarse como estaba previsto "debido a un problema con los sistemas terrestres", afirmó Blue Origin en la red social X, en la que precisa que pronto anunciará una nueva fecha.

Blue Origin ya había indicado que postergaba el despegue una hora debido a las bajas temperaturas en la plataforma de lanzamiento, en el oeste de Texas.

La misión, denominada NS-24, no llevará tripulantes. Se limitará a experimentos científicos, más de la mitad de los cuales fueron desarrollados con el apoyo de la NASA.

El accidente ocurrido en septiembre de 2022 provocó la caída del módulo de propulsión del cohete, que en ese momento no transportaba a pasajeros.

El regulador de aviación estadounidense (FAA) abrió una investigación, la cual concluyó en septiembre que el accidente fue causado por "una temperatura más alta de lo esperado en una boquilla del motor".

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