Un cliente de la cadena Burger King en Oregón, Estados Unidos, identificado como Curtis Brooner demandó a esa cadena luego de que el establecimiento renunciara a la promesa de darle hamburguesas gratis de por vida.
La promesa fue hecha por el administrador del recinto luego de que Brooner tuviera que pasar una hora encerrado en el baño del lugar. Al parecer, el cliente entró al cuarto para lavarse las manos y cuando fue a halar la puerta, esta no abrió.
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De acuerdo a lo dicho por el abogado de Curtis, a éste le pasaron un matamoscas para que pudiera abrir la puerta, pero lo único que ocasionó este instrumento fue una herida en su mano. Tras una hora de encierro, finalmente Bronner fue liberado por un cerrajero.
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Bronner admitió que el establecimiento cumplió con su promesa durante varios meses, sin embargo, el hombre de 50 años demandó al local por una suma cercana a los 9.000 dólares.
"Determinamos que su vida duraría 72 años, lo cual es aproximadamente 5 años menos que el promedio en función de su consumo frecuente de hamburguesas de queso", detalló el representante de Brooner en la cadena televisiva KATU 2.
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