En el norte de la isla de Cárpatos, el pueblo de Olympos acoge una de las pocas sociedades matriarcales de Grecia que resiste al turismo y a la uniformización del estilo de vida
En su taller en una callejuela estrecha de este pueblo de apenas 300 habitantes, Rigopoula Pavlidis trabaja con su máquina de coser
exclama orgullosa. Giannis, su esposo, asiente mientras pinta iconos
bromea la sexagenaria
Las mujeres de Olympos desempeñan un papel central en la sociedad que remonta a un antiguo sistema de herencia de la época bizantina
A pesar de la ocupación otomana a partir de 1538 y la presencia italiana en esta isla del mar Egeo entre 1912 y 1944, Olympos ha mantenido su peculiaridad
Aislada del resto de la isla, esta aldea resistió a los cambios hasta que se construyó una carretera asfaltada en los años 1980
Ahora, cada verano, miles de turistas ascienden hasta la pintoresca localidad. Pero esta tradición matriarcal sigue bien viva
explica Giorgos Tsampanakis, historiador nacido en esta isla, situada entre Creta y Rodas
"Las familias no tenían suficientes bienes para dividirlos entre todos los niños (...) Y si hubiéramos dejado la herencia a los hombres, la habrían dilapidado", afirma
Después del matrimonio, los hombres van a vivir a casa de la esposa. El dominio femenino se encuentra también en la transmisión de los nombres
explica Tsampanakis
añade
A partir de los años 1950, la emigración de hombres hacia Estados Unidos y otros países europeos obligó a las mujeres a gestionar ellas solas las explotaciones agrícolas
En Avlona, una aldea vecina de Olympos, Anna Lentakis recoge con ímpetu a sus 67 años las alcachofas con las que va a preparar una tortilla para su pequeña cantina
recuerda
Hasta hace unos años era propietaria de la taberna "Olympos" en el pueblo homónimo. Pero ahora es su hija mayor, Marina, quien se ha hecho cargo de ella
"Me gusta decir que el hombre es la cabeza de la familia y la mujer, el cuello. Es ella quien orienta las decisiones tomadas por el hombre", dice Marina
Su hija Anna solo tiene 13 años, pero ya sabe que un día tomará el relevo: "Es la herencia de mi abuela y estaré orgullosa de ocuparme de ella"
"Las hijas pequeñas deben quedarse en la isla para estar al servicio de las mayores. Se ha creado una especie de casta social", señala Alain Chabloz, miembro de la Sociedad de Geografía de Ginebra que ha estudiado este fenómeno
Giorgia Fourtina, hija pequeña y soltera, no siente que Olympos sea tan progresista. "Es una pequeña sociedad donde una mujer sola en un café está mal vista", explica
Las mujeres del pueblo visten normalmente vestidos bordados con delantales floreados, un pañuelo en la cabeza y botas de cuero. Son verdaderos tesoros que suelen formar parte de la dote
Irini Chatzipapa, de 50 años, es la mujer más joven de Olympos en llevar cotidianamente esta vestimenta
dice la panadera
Esto genera inquietud en su madre Sofía, de 70 años, que todavía administra su café
"Nuestras costumbres se convierten simplemente en un folclore para las fiestas (...) Nuestro mundo está desapareciendo"
Para ver más haga clic en el siguiente botón