entre los dos países.
La línea abarcaría unos 600 kilómetros con una capacidad de interconexión de 300 megavatios. Para eso se creó una empresa conjunta integrada por la Empresa de Transmisión Eléctrica de Panamá (ETESA) e ISA de Colombia, responsable de construir y operar la línea de transmisión de energía entre ambos países. Ese proyecto fue valorado en unos 300 millones de dólares, que se aportarían por partes iguales.
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La interconexión que inicialmente se había programado para que estuviese lista en 2014 nunca arrancó y hace algunas semanas el presidente de Panamá, Ricardo Martinelli, dijo que no seguiría adelante con el proyecto por falta de recursos económicos.
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Ese trayecto que pasa entre Colombia y Panamá, y que está detenido, es el único que falta para que Colombia y otros países andinos puedan interconectarse con toda Centroamérica hasta llegar a México.
Pero la realidad es que Panamá tiene graves problemas de suficiencia energética debido al acelerado crecimiento del país y a la falta de lluvias de esta temporada. La demanda diaria es de unos 1430 Megavatios de los 1700 que produce.
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Juan Fernandez
Periodista de El Espectador.
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