¿Con cárcel disminuiría el número de conductores borrachos? Debate

comparendos por esa causa.

El últimos de los casos fue el de Fabio Andrés Salamanca, quien conducía por la calle 26 a 160 kilómetros por hora y en grado tres de alcoholemia. En su camioneta Audi, el joven arrolló el taxi en el que se transportaban Ana Torres, de 25 años, y Diana Bastidas, de 26, empleadas de una entidad bancaria y quienes perdieron la vida. El conductor del carro de servicio público se encuentra en grave estado de salud.

¿Cómo hacer para que los colombianos tomen conciencia? ¿Es posible que se dejen de perder vidas por esta causa?

“La ley presume que cuando uno conduce en estado de embriaguez el homicidio es doloso, lo que aumenta la condena. El problema no son las penas sino la capacidad de control”, comentó Héctor Riveros.

“En Colombia se combina la tolerancia con el alcoholismo, con la velocidad y la falta de control. No creo en los castigos ejemplares a una sola persona. Hay que aplicarle la ley pero debe haber más controles”, aseguró Héctor Abad.

“Este es uno de los necesarios donde se necesita garrote, como legislación para meter a jóvenes a la cárcel, y zanahoria, con campañas de salud pública más eficaces”, planteó Laura Gil.

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