en los que no se respetó la ley seca, el distanciamiento mínimo y ni siquiera el uso obligatorio de tapabocas para salir a la calle.
Vea aquí:
En barrios populares como El Bosque, Santa María, La Sierrita, La Ceiba, la Policía tuvo que emplearse para disolver celebraciones familiares con alto número de personas y reuniones en la calle. En total fueron 433 los comparendos impartidos hasta la noche del domingo.
En el centro y norte de la ciudad las calles estuvieron despobladas, pero se vivió un colapso de los servicios de restaurantes y domicilios ante la elevada demanda.
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En municipios como Soledad y Malambo, con toque de queda durante las 24 horas del día, tampoco se respetaron las normas de aislamiento.
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