Después de dejar su cargo en agosto de 2014, la ex contralora Sandra Morelli Rico reapareció en una audiencia pública en la Corte Suprema de Justicia, para reiterar su inocencia en un proceso que afronta en este alto tribunal por presunta corrupción en la adquisición de una sede para ese organismo de control en 2012.
La Fiscalía acusó a la ex funcionaria de haber suscrito, de manera irregular, dos contratos que buscaban la reubicación de más de 2.000 funcionarios de la Contraloría en el centro de Bogotá a una nueva sede en el centro comercial Gran Estación de Bogotá, donde pagaría mensualmente más de 2.500 millones de pesos. Esto ocasionó, según la Fiscalía, un detrimento patrimonial al Estado.
Según las investigaciones desarrolladas por la Fiscalía, no existió la necesidad, ni el riesgo de reubicar la sede de la Contraloría, pues a través de estudios de ingenieros expertos se demostrará ante la sala de juzgamiento que esta fue una maniobra irregular que en el trascurso del juicio oral se demostrará.
“Ninguno de los documentos invocados sustentaba lo que se señaló en el proyecto del 22 de julio de 2011 sobre la necesidad imperativa de modernizar, actualizar y optimizar las instalaciones físicas de los tres inmuebles”, indicó el fiscal Carlos Iván Mejía, al destacar que tampoco se hizo estudio de resistencia a los simos a la torre Colseguros del Centro de Bogotá, donde supuestamente estaban en riesgo los empleados del organismo de control.
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Por decisión del magistrado ponente, la audiencia de juicio oral fue suspendida y reiniciará en febrero de 2022.
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