En principio se dijo que el Ministerio Público intentó una inspección en documentos sobre bienes del fiscal general Eduardo Montealegre que reposaban, supuestamente, en la notaria 73 de Bogotá, en busca de documentos que lo comprometerían en negocios con SaludCoop.
La inspección fue frustrada en la noche del miércoles por una llamada personal de Eduardo Montealegre a Alejandro Ordóñez, Procurador general, en la que le habría dicho que no tiene potestad para investigarlo.
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Sin embargo, se conoció que la inspección ordenada desde la Procuraduría fue contra el Superintendente de Salud por solicitud de la contralora Sandra Morelli, quien sostiene que Gustavo Morales ocultó certificaciones sobre los vínculos de SaludCoop con Eduardo Montealegre.
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La llamada del fiscal al procurador sí se produjo pero en ella el primero aclaró que el allanamiento no fue en una notaría sino en las oficinas de la Superintendencia. Luego de la aclaración, Montealegre, incapacitado por una cirugía, ordenó a sus abogados entregar a la Procuraduría copias de todas sus escrituras.
Montealegre ha sido cuestionado por contratos que celebró antes de ser fiscal con la EPS SaludCoop, que se comprobó usó el dinero de la salud para fines personales.
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