Las sospechas de EE.UU. sobre los presuntos vínculos de Uribe con paramilitares

En las revelaciones publicadas por la Associated Press (AP) ‘Cables EEUU: Uribe pudo tener vínculos con paramilitares’, hay una conversación de 2004 entre Peter Rodman, quien era el entonces subsecretario de Defensa para Asuntos de Seguridad Internacional en la administración de presidente George W. Bush, con Donald Rumsfeld, secretario de Defensa. En ella, Rodman escribió que “casi con toda seguridad, (Álvaro) Uribe tuvo tratos con los paramilitares (AUC) cuando era gobernador de Antioquia” en los años noventa.

Por esa época Estados Unidos había declarado en 2001 a las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC) organización terrorista extranjera.

La AP dice que en los cables “hay insinuaciones recurrentes, no tan sutiles, de que el Ejército colombiano, aliados claves de Uribe, y posiblemente el propio presidente, habían establecido alianzas con las AUC (…)”.

Sin embargo, aclara que, pese a esto, los documentos no incluyen ninguna descripción específica de interacciones directas entre el expresidente Uribe y los paramilitares, y hay poco que demuestre si Estados Unidos intentó determinar si esa relación existió realmente y a qué niveles.

Sobre esas supuestas alianzas entre el ejército y las AUC, citan un informe de la Agencia de Inteligencia de Defensa de 1997 en el que aparece el nombre del general Rito Alejo del Río, quien fungió como comandante de la 17ma Brigada del Ejército hacia el final del primer mandato de Uribe como gobernador de Antioquia.

Dice que destaca que la cooperación militar con paramilitares había “empeorado mucho” con el general Rito Alejo del Río. El documento señala que otros dos oficiales “nunca se permitieron implicarse directamente en el fomento o apoyo de actividades paramilitares, pero dieron la espalda a lo que estaba ocurriendo”.

Dentro de los documentos revisados por la AP, hay uno que tiene el testimonio de Jorge Alveiro Valencia, un dentista, ganadero y legislador conservador suplente. Es un cable de la embajada del año 1997. En él, esta descrito un relato de Valencia que describe cómo paramilitares asesinaron a civiles y guerrilleros en esa época. También habló de los “asesinatos castigo”.

Valencia asegura, según el cable, que, en su caso, los paramilitares “lo respetan por su posición contra las guerrillas", ya que manifestó odiar a la guerrilla a la que le atribuye la muerte de su padre. Además, manifestó su admiración por Álvaro Uribe describiéndolo como “limpio y honesto" asegurando que no estaba implicado con ellos (los paramilitares).

En el cable también el dentista y ganadero cuenta que fue secuestrado y amenazado por paramilitares en 1996. Relata al personal de la embajada que lo que lo salvó fueron unos documentos que llevaba en su maletín y que demostraban que conocía a Uribe. “Oh, conoce a ‘El Viejo’”, dijeron supuestamente sus captores.

La AP señala que en un vistazo a las entrañas de la postura del gobierno estadounidense sobre la administración de Álvaro Uribe comprendida entre 2002 y 2010, Washington estaba complacido con “el enfoque agresivo” que tenía el entonces gobierno colombiano en la lucha contra los grupos guerrilleros, responsables de secuestros (de los que varios ciudadanos estadounidenses fueron víctimas), asesinatos y narcotráfico trasnacional.

En dicha revisión, la AP encontró que, en un informe, un funcionario de alto nivel del Pentágono elogió que el ejército de Uribe hubiese abatido a 543 miembros de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y capturara a 1.063 más en la primera mitad de 2003.

Todos estos documentos, cables diplomáticos estadounidenses, reportes de la CIA y otras notas fueron obtenidas por el instituto de investigación del Archivo Nacional de Seguridad a través de solicitudes en base a la Ley de Transparencia y Acceso a la Información Pública de Estados Unidos y a los que posteriormente la AP tuvo acceso.