El papá de Diego Fernando Castro, el bombero de 32 años que el pasado sábado falleció luego de estar implicado en la muerte de un menor de edad en la estación de Bomberos de Kennedy, en el sur de Bogotá, aseguró que su hijo no se suicidó.
Dijo que tenía varias razones para vivir como su esposa y su hija, y denunció que el pasado jueves, cuando se llevó a cabo el velorio del niño Nicolás Quevedo de 7 años, el bombero fue amenazado por la familia del menor (Lea también: Se suicidó bombero investigado por fallecimiento de menor: alcalde Petro).
“En el entierro del niño había algunas personas de la familia del niño que estuvieron muy agresivas con los bomberos y lanzaron amenazas, también por redes sociales se lanzaron amenazas contra los bomberos que estaban cuidando los niños. La esposa de Fernando (su hijo) que a él lo estaban llamando los compañeros para informarle que estaban lanzando amenazas contra él, su hija y la familia”, dijo el papá del bombero.
El padre de Diego Fernando Castro agregó que en uno de los carros de bomberos donde movilizaban a una parte de la familia del menor durante la caravana fúnebre, amenazaban con tomar represalias por la pérdida del niño (Lea también: Por homicidio culposo, investigarán a bomberos involucrados en muerte de menor).
Cabe recordar que el bombero implicado apareció ahorcado en el Centro Don Bosco y una persona llamó a informar que presuntamente se habría suicidado.
Cuerpo de Bomberos Bogotá. Imagen de referencia Foto: Archivo EFE
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