Un toro que se escapó de la plaza de toros de Aguazul, prendió las alarmas sobre la seguridad de este tipo de eventos en el país. El ejemplar logró burlar la seguridad y recorrió algunas calles de la capital arrocera de Casanare.
El toro embistió a cuanta persona o vehículo encontró a su paso y al final se registró un saldo de 4 heridos.
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Uniformados de la Policía trataron de controlar al ejemplar, pero todos los esfuerzos fueron inútiles. La única manera que encontraron de manejar la situación fue sacrificando al toro a disparos.
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Mientras la gente gritaba pensando que podía suceder alguna tragedia, se anunció que se cancelaría la corrida, para mantener el orden público, pero los gritos ensordecedores de los asistentes hicieron que finalmente se continuara con el evento.
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A través de redes sociales, se presentaron durísimas críticas por todo lo sucedido en el evento taurino de Aguazul. El fracaso deja en el debate público, nuevamente, la discusión de prohibir las corridas de toros en el país.
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