que tendrá lugar este viernes en Washington.
La Comisión, que defiende y promueve los Derechos Humanos en la región, lleva año y medio discutiendo cómo actualizar y reformar los procedimientos y prácticas en esa normatividad. Ya entregó un informe a la Organización de Estados Americanos y esta deberá aprobar o rechazar esas reformas.
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Sin embargo, Álvarez apuntó: “Se quiere estrangular financieramente a la comisión y poner limites a contribuciones de manera que los trabajos se pudieran limitar”
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“Esperamos que los Estados se hagan cargo de los compromisos porque la CIDH no tiene recursos para trabajar”, agregó el funcionario.