Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Reciba notificaciones de Blu Radio para tener las principales noticias de Colombia y el mundo.
No activar
Activar

Publicidad

Referendo para tumbar JEP: país sigue atrapado en Sí y No: opinión de Ricardo Ospina

Según analistas, el país está atrapado por la decisión del presidente Duque de objetar algunos puntos de la ley estatutaria de la JEP.

Ricardo Ospina // Foto: Blu Radio
Ricardo Ospina // Foto: Blu Radio

Uno de los “caballitos de batalla” del uribismo para llegar a la presidencia en 2018 fue denunciar que, según ellos, a pesar de que por un ligero margen ganaron quienes apoyaron el No al acuerdo de paz con las Farc, el gobierno de Juan Manuel Santos les hizo “conejo” y terminó firmando el acuerdo del Teatro Colón.

Esa afirmación es una verdad a medias, porque en la renegociación del acuerdo tras la derrota del Sí en el plebiscito por la paz, se acogieron la mayoría de las peticiones del No, a excepción de algunos puntos que eran las líneas rojas de la guerrilla, y cruzarlas no hubiera permitido que cerca de diez mil guerrilleros abandonaran sus fusiles.
Lea también: Ataques contra fuerza pública son lamentables: opinión de Ricardo Ospina

Este episodio recobra actualidad porque el país pareciera atrapado en lo que sucedió en octubre de 2016, dividido entre el sí y el no, primero, según analistas, por la decisión del presidente Iván Duque de objetar algunos puntos de la ley estatutaria de la JEP y ahora con ocasión de un referendo que pretende convocar un movimiento llamado Libertad y Orden, para derogar la JEP y revocar a todos los magistrados de las altas cortes.

Aunque parece poco probable que esta iniciativa prospere, pues necesitan conseguir 1'853.000 firmas válidas antes del 14 de diciembre, luego debe pasar por el Congreso y por la Corte Constitucional, resulta muy inquietante que a través de esa vía se pretenda tumbar uno de los elementos clave del acuerdo con las Farc y además, se quiera hacer una purga total de quienes han sido, aún con algunos errores y problemas, guardianes del Estado de Derecho.

Publicidad

Entre otras cosas, el referendo parece haber nacido muerto porque su primer artículo busca revocar a los actuales senadores y representantes a la Cámara, que, en caso de que sus promotores logren conseguir las firmas, tendrían que aprobarlo y discutirlo, así que es poco probable que el propio Congreso decida ponerse “la soga al cuello”.

Los promotores de la iniciativa son nueve personas, entre ellas el periodista Herbin Hoyos, dedicado recientemente al activismo político, y Sergio Giovanny Alzate González, vocero del movimiento, quien según la página de la Secretaría del Senado, trabajó en la UTL de la exsenadora Sofía Gaviria, dura crítica del acuerdo de paz y hoy embajadora de Colombia en Suiza.

Publicidad

El uribismo ha salido a apoyar esta iniciativa, total o parcialmente, como lo ha reconocido su jefe natural, el expresidente Alvaro Uribe, quien dijo que está de acuerdo con la revocatoria de la JEP, pero se mostró cauto frente a la revocatoria de todos los magistrados de las altas cortes.

Uribe de nuevo abrió el debate sobre el Estado de Opinión, figura a la que ya había apelado José Obdulio Gaviria cuando era su asesor presidencial y estaba definiéndose una posible reelección indefinida.

Para Uribe, el Estado de Opinión es superior al Estado de Derecho, mientras que para otros sectores, eso significaría que las mayorías, así apoyen iniciativas equivocadas o incluso graves para los derechos fundamentales, terminarían imponiéndose.

El “caldo de cultivo” para este referendo tiene que ver con la indignación contra la JEP por el caso 'Santrich' y contra las Cortes entre otras por el fallo que permite el consumo de alcohol y drogas en el espacio público. En cualquier caso, más allá de las críticas, algunas válidas, este

parece ser el momento de la reflexión y del análisis informado y no el momento de arrasar con la independencia judicial.

Escuche la editorial completa de Ricardo Ospina en Mañanas BLU:

Publicidad

Publicidad

 

  • Publicidad