¿Cómo manejar el estrés familiar e infantil en medio de la cuarentena?

Los niños, que ahora tienen clases virtuales y permanecen en sus hogares en compañía de sus padres han tenido que adaptarse a una nueva realidad sin sus amigos y repartiendo el tiempo entre las tareas, la tecnología, los juegos de mesa, la televisión y los deberes de casa.

Sin embargo, lo más difícil para los menores de edad es no poder estar en los parques o tener contacto con sus amigos.

En diálogo con Blu Radio, varios padres de familia explicaron que para sus hijos lo más duro han sido son cosas como “tener su bicicleta guardada, sus patines guardados, no poder ir a visitar a sus amiguitos”, así como “extrañar mucho la actividad física, salir al parque, jugar fútbol”.

Pero ¿qué se puede hacer para mejorar la convivencia y calmar el estrés que puede producir el encierro? Según la psicóloga Juanita Lleras, profesora de posgrados de la facultad de Educación de la Universidad de la Sabana, “esta situación nos está demandando ser muy recursivos y creativos”.

Lleras asegura que esta es importante “instaurar espacios de escritura, así como planes de dibujo, rutinas de actividad física dentro de la casa, espacios de meditación, hacer yoga, meditación”.

TIPS para adaptarse al cambio de rutina

-Bajar los niveles de autoexigencia, es decir “reconocer que a todos nos está tocando hacer cosas distintas y nuevas, en las que de pronto no somos tan buenos. Flexibilizar la autoexigencia, nos ayuda a movilizar ciertos recursos para mejorar la convivencia”, afirma la doctora Juanita Lleras.

-Ser recursivos y creativos, alentar a la creatividad a todos los integrantes del hogar.

-Hacer pausas activas cuando se pase mucho tiempo frente a las pantallas como computadores, televisores, tabletas o celulares y adecuar una buena postura corporal al manipular estos aparatos.

-Facilitar espacios de soledad para los miembros de la familia. “Son necesarios los espacios de silencio y de soledad para permitirnos una dinámica y una mejor convivencia entre todos”, explica Lleras.

-Activar todos los mecanismos de autocuidado comenzando con la alimentación con una dieta baja en azúcares, alta en proteína, agua y verduras y frutas verdes, rojas y amarillas.

-Fijar horarios para acostarse, levantarse y bañarse.

-Tener un manejo asertivo de las emociones, con estrategias de resolución de conflictos.

Finalmente, la doctora Lleras explicó que “es clave que si efectivamente estamos sintiendo en las familias que está haciendo sobre demandante y que la situación está desbordante, es importante pedir ayuda. Hay varios recursos en las instituciones educativas los equipos que están pendientes para atender solicitudes y demandas”.