Cada 13 de abril se celebra el Día Internacional del Beso, después de que en esa fecha se rompiera el récord del beso más largo de la historia, que duró 58 horas y fue protagonizado por una pareja tailandesa. Pero tenga en cuenta que, al momento de besar, millones de partículas se transmiten y hasta enfermedades pueden surgir.
Según un estudio realizado por la Organización de Investigación Científica Aplicada de Holanda, hasta 80 millones de bacterias se pueden llegar a compartir con un beso en apenas 10 segundos. Otro estudio publicado en The American Journal of Medicine reveló que cada beso puede contener hasta mil millones de bacterias, de cerca de 278 especies diferentes, además de virus, aunque el 95 % de estos patógenos suelen ser inofensivos en personas sanas.
“Uno sabe que una de las fuentes de contagio de infecciones son los besos. En virología hay varias infecciones que se contagian por besarse. Las más clásicas son las gripas, pero también pueden salir herpes o fuegos que se transmiten por el simple beso. Incluso hay una enfermedad que se llama la enfermedad del beso que es transmitida por un virus que se llama Epstein-Barr”, le dijo a BLU Radio la viróloga de la Academia Colombiana de Ciencias María Fernanda Gutiérrez.
Según la CDC en Estados Unidos, el virus de Epstein-Barr (VEB) es uno de los virus más comunes en los seres humanos. Se encuentra en todo el mundo. La mayoría de las personas se ha infectado con el VEB en algún momento de su vida; se propaga más comúnmente por medio de los líquidos corporales, en particular, la saliva. El VEB puede causar mononucleosis infecciosa, también llamada “mono” en inglés, y otras enfermedades.
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Sin embargo, en tiempos del COVID-19 se creó un mensaje de alerta al momento de besar por posibilidad de contagio en las personas. La doctora María Fernández Gutiérrez explicó esta relación.
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“El virus del SARS-COV2 se transmite es por vía respiratoria. La discusión es que antes de que uno bese, conversa. La conversación si saca estas gotas de saliva que es lo que uno puede respirar más fácilmente y contagiarse. Es muy difícil no conversar cuando hay un beso”, concluyó.
Las parejas suelen tener un microbiota salival similar, es decir, comparten la misma cantidad de microorganismos parecidos en el cuerpo. Estudios han comprobado que el tipo de bacterias que viven en la boca suele ser más similar entre novios que entre personas que no tienen relación entre ellas. Y que, cuanto más se besa una pareja, más similar es la composición del microbiota de su saliva.
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