El embajador de Francia en Colombia, Jean-Marc Laforêt, confirmó en entrevista con BLU Radio que está pidiéndole al Gobierno colombiano que evalúen el tema de los impuestos a las bebidas espirituosas, entre ellas al vino.
Según Laforêt, el sustento para hacer la petición es sencillo.
“No solamente los embajadores de Francia, España o Italia están colocando este tema. Hace poco mis colegas de Argentina y Chile, que son dos grandes países productores y consumidores de vino lo hicieron. Es difícil considerar al vino de una misma manera que un destilado que tiene 40 grados de alcohol”, explicó.
Añadió que el vino es un alcohol fermentado y “en todos los países de la OCDE, en la gran mayoría de los países de la Unión Europea es considerado un alimento”.
El proyecto de ley del Gobierno busca un impuesto del 35 % a los licores. Por ejemplo, si una botella de vino cuesta hoy 100.000 pesos, pasaría a costar $135.000.
Entre tanto, la viceministra de Hacienda Ximena Cadena dijo que el impuesto está diseñado en que se paga por grados de alcohol.
“Eso quiere decir que dos productos que tienen el mismo grado de alcohol pagan el mismo impuesto”, añadió.
Así las cosas, una champaña Dom Perignon cuesta en el mercado unos 600 mil pesos y paga de impuestos los mismos 4.000 pesos que el vino Moscatel, que cuesta unos 10.000 pesos.
Lo que cambia en el proyecto de ley es que se pasa de un esquema solamente basado en los grados de alcohol a un esquema donde hay impuesto mixto (por grados de alcohol y un componente ad valorem).
“Eso lo que logra es mayor equidad. Un producto más costoso va a tener que pagar más impuestos, es simplemente equidad tributaria”, finalizó.
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