Científicos de la Universidad de Tecnología de Graz en Austria han patentado un proceso llamado "Vainillaflow" que utiliza vainillina, el compuesto principal de la vainilla, para producir el electrolito líquido central en baterías de flujo redox

A diferencia de métodos anteriores que utilizaban vainillina derivada de lignina, este proceso innovador, que funciona a temperatura ambiente, evita el uso de costosos y tóxicos catalizadores metálicos. El proceso abre nuevas perspectivas para un almacenamiento más sostenible de electricidad

Este proceso, que combina inteligencia artificial y aprendizaje automático con la tecnología de baterías de flujo, se enfoca en sustituir las materias primas actuales e insostenibles por materiales renovables

El equipo dirigido por Ulrich Hirn, catedrático de la Universidad de Tecnología de Graz y presidente del Comité Internacional de Física del Papel, busca desarrollar enfoques innovadores para el almacenamiento integrado de energía

El proyecto "Vainillaflow" busca impulsar la transición hacia fuentes de energía renovable, considerada crucial para abordar el calentamiento global

El Consejo Europeo de Innovación proporcionará aproximadamente 4,6 millones de euros en los próximos tres años para respaldar este plan, que tiene el potencial de transformar la manera en que se almacena la energía de manera sostenible y respetuosa con el medio ambiente

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