Las imágenes del visitante metido en el estanque de los animales de la fauna silvestre se viralizaron en las redes sociales y sirvió como material probatorio para su arresto

Durante la jornada del miércoles, 19 de abril, en Nueva Zelanda, un hombre que estaba de visita en uno de los zoológicos de ese país, irrumpió en el hábitat de los rinocerontes y los antílopes y se metió al estanque

Sin importar la mirada de los demás visitantes y de los animales, que se asustaron ante la presencia del intruso, el hombre se sumergió en el agua, se lavó la cara y el cabello y, posteriormente, como si se tratara de una piscina se tumbó y flotó durante una rato de espalda

Según los testigos de los hechos, el hombre permaneció 15 minutos dentro del recinto de los animales, sin escuchar los llamados de los guardas de seguridad del zoológico, quienes le estaban pidiendo que se saliera del agua

Cuando el hombre por fin hizo caso y volvió a la zona segura de los visitantes, los guardas de seguridad lo entregaron a la policía para que procediera con el arresto

A pesar de la imprudencia que cometió el visitante, el director del zoológico pidió a las autoridades que ayudaran al hombre, pues según él era evidente que necesitaba recibir un apoyo por parte de especialista

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