El tejido adiposo permite a los mamíferos producir calor y puede proteger contra algunas complicaciones metabólicas. Un estudio para saber más de su origen señala que evolucionó exclusivamente en los mamíferos placentarios modernos.
Además de generar calor, la grasa marrón puede proteger contra complicaciones metabólicas mediante la combustión del exceso de grasa y azúcares.
Un estudio de la Universidad de Estocolmo comparó la grasa marrón en mamíferos placentarios y marsupiales, demostrando diferencias clave en su evolución y función termogénica.
La proteína UCP1, presente en la grasa marrón de los mamíferos placentarios, transforma las mitocondrias en unidades de calentamiento que convierten directamente la grasa y el azúcar en calor.
Comprender cómo funciona la grasa marrón es crucial para desarrollar tratamientos contra la obesidad, la diabetes y las enfermedades cardiometabólicas.
Los marsupiales poseen una forma de grasa marrón que no ha evolucionado para tener propiedades termogénicas, lo que sugiere que la capacidad de producir calor se activó después de la divergencia entre mamíferos placentarios y marsupiales.
Los investigadores utilizaron herramientas bioinformáticas para reconstruir la proteína UCP1 tal como existía hace unos 110 millones de años, demostrando que ya podía producir calor en el ancestro de los mamíferos placentarios.
Para ver más haga click en el siguiente botón: