“Cuando una persona consume agua de un cuerpo de agua contaminado es porque nosotros botamos en el inodoro o en la caneca medicamentos vencidos y se pueden desarrollar procesos de resistencia bacteriana”, dijo Trujillo.
El director de la Corporación Punto Azul indicó además que “es importante entender que somos nosotros mismo los culpables de que estos medicamentos terminen contaminando el medio ambiente”.
Para finalizar indicó que es necesario que mensualmente las personas se acerquen a este punto para llevar la medicina vencida ya que sin importar las razones por las cuales fueron recetados, estos pueden generar contaminación.
“Todos los medicamentos son dañinos independientemente del fin por el cual haya sido recetado, cada medicamento que compremos hay que guardarlo y llevarlo a los puntos azules para evitar que se genere este proceso de contaminación y problemas de salud pública como falsificación y contrabando”.