y la procedencia de los disparos que acabaron con la vida del líder del M19.
El informe señala que los impactos con arma de fuego fueron realizados a corta distancia y de atrás hacia adelante. El asesino, Gerardo Gutiérrez, que sería uno de sus escoltas, iba en la silla de atrás.
Según testigos del hecho, ocurrido el 26 de abril de 1990, en pleno vuelo cuando viajaba de Bogotá a Barranquilla, este se levantó y se dirigió al baño de donde salió armado y remató a Pizarro Leongómez.
El informe detalla que los tres disparos impactaron su cabeza y no solo venían de atrás hacia adelante sino de derecha a izquierda.
El cuerpo del exguerrillero fue exhumado en noviembre pasado queriendo establecer con certeza el origen de los disparos con el propósito de enrutar nuevas investigaciones.