burlar a las autoridades señalando que había sido atacada con ácido para poder cobrar la recompensa de $75 millones que se ofrecía.
“No logró consumarse el delito porque quedó en grado de tentativa, podría configurarse una tentativa de un fraude o estafa hacia las autoridades públicas. La autoridad tiene que formular la denuncia para que el juez defina la conducta”, explicó.
Según Strusberg, entre 6 y 8 años de cárcel podría pagar Inés Carrillo por este hecho.