Con un proyecto de vivienda, denominado Cachalú, 70 familias en San Gin aseguran que las estafaron porque después de cuatro años siguen esperando a que les entreguen los apartamentos por los que pagaron.
Los vendedores del plan prometían cuatro torres, dos con 50 apartamentos y las otras de 20. El constructor entregó solo una torre pero esta presenta graves fallas estructurales, según informaron los propietarios de los apartamentos.
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Los propietarios también denunciaron que hace tres años detuvieron la construcción de las tres torres que faltaban por construir y el representante legal de la constructora, Martín Rodríguez, se fue de San Gil.
“Esto quedó en obra gris y obra negra, la entrada está en terribles condiciones, la montaña se está derrumbando, aquí hay mucho policía que invirtió, acá que creyeron en el constructor, y como eran baratos los apartamentos, alcanzó a recoger más de $1.800 millones”, denunció Óscar Ballesteros, una de las personas que invirtió su dinero en el proyecto.
Cada familia asegura que entregó de $25 a $50 millones para tener su vivienda propia. La denuncia ya fue interpuesta ante la Fiscalía General de la Nación.