El Consejo de Medicina de Nuevo México, en Estados Unidos, suspendió al ginecólogo obstetra Christopher S. Driskill, de 42 años, tras hallarlo culpable de dejar a una embarazada en trabajo de parto para tener sexo con otra mujer.
El médico fue calificado de ser un peligro a la seguridad y salud pública, pues además fue denunciado de llegar constantemente ebrio al trabajo.
S. Driskill fue sorprendido cuando tenía relaciones sexuales con otra paciente, momento en el que le abrieron la investigación.