Esa horrible cara de un fenómeno viejo que ahora parece revivir en nuestro país, se ha presentado en las últimas horas en el norte de Bogotá, cuando el CTI, el Ejército y la DEA encontraron adentro de un lujoso carro Toyota adscrito al Congreso, la no despreciable suma de 614 millones de pesos en efectivo.
El conductor de ese carro, perteneciente según documentos al esquema del representante a la Cámara por el Partido de La U en Guaviare, Alexander García, era Luis Javier Rojas, hijo de la directora financiera del Congreso de la República.