En este caso, una cebra que cruzaba por el río Mara en la reserva nacional Maasai Mara, parecía no temerle al cocodrilo que se encontraban en el lugar y decidió tomar agua, acto que aprovechó el depredador para atacar.
Lo que no esperaba era que la ‘victima’ no se quedaría se defendería y que además respondería a sus mordidas, dejando sin opción al cocodrilo que tuvo que soltarla.
El fotógrafo sudafricano Nelis Wolmarans presenció dicha pelea y aprovechó para hacer registro y una descripción del hecho:
Un cocodrilo mostró interés, seguido de varios más, nadando hacia una sola cebra que estaba haciéndose camino hacia el otro lado del río. Se le acercaron por detrás y empezaron el ataque.
La cebra peleó mucho, casi llegando hasta el otro extremo cuando fue agarrada y arrastrada de vuelta al río. La cebra seguía peleando e intento morder a los cocodrilos de vuelta. De algún modo logró milagrosamente librarse de sus mandíbulas y escapó al otro lado del río, aunque no sin heridas.