La expansión del coronavirus y los efectos económicos de la cuarentena tienen al país en una situación compleja, por lo que el reto del Gobierno es pasar al otro lado de ese ‘río caudaloso'.
El Gobierno ya le pidió al FMI acceso a apoyo financiero y está esperando la respuesta.
"Pasamos de una crisis de salud pública a una crisis humanitaria y a una crisis económica. Hay empresas, micro, pequeñas y medianas empresas, que tienen unas dificultades enormes en este momento en materia de sus flujos de caja", señaló el ministro de Hacienda, Alberto Carrasquilla.
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El Gobierno está viendo esta situación por etapas, o “anillos”. Para la atención en salud ya se destinaron unos $7 billones, para la atención a las familias vulnerables $1.7 billones y para la crisis empresarial $3.2 billones.
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La estrategia del Gobierno para la crisis empresarial es asumir los riesgos de crédito con la banca a través del Fondo de Garantías.
La cuarta preocupación del Gobierno es evitar que la situación actual se transforme en una crisis en el sector financiero, para eso se están tomando precauciones.
"El Fondo Monetario Internacional está en este momento estudiando nuestra solicitud de que tengamos acceso como país a los 11.000 millones de dólares de lo que se llama la facilidad de liquidez", aseguró Carrasquilla.