Europa es en este momento una mar de inmigrantes que huyen de la violencia, del desempleo y de la una barbarie occidental llamada Estado Islámico.
Miles de refugiados llegan en búsqueda de esperanza y de una nueva oportunidad de vida. Familias enteras viajan miles de kilómetros en búsqueda de esa ventana que promete la vida al cerrar una puerta.
Y así como cientos han sido recibidos como supervivientes o héroes, miles más han sido tomados como delincuentes o rechazados, problema que se da por el miedo económico y por la xenofobia que parece tomarse de nuevo algunas calles europeas.
Pero siempre existen excepciones que van más allá de razones políticas, sociales o económicas, que nos demuestran que la bondad y la inocencia se unen cuando los límites territoriales parecen no existir.
Así se dio a conocer un video donde un par de niñas, una alemana y una refugiada siria, quienes sin conocerse se tienden la una a la otra la mano y se dan un saludo fraternal de bienvenida.