La tragedia en la discoteca Jet Set de Santo Domingo, República Dominicana, ha dejado al mundo consternado. El colapso del techo del local, mientras se presentaba el popular merenguero Rubby Pérez, cobró la vida de al menos 231 personas, incluyendo 221 en el lugar del desastre y 10 más en los hospitales, a causa de las graves heridas. Más de 180 personas resultaron heridas, algunas de ellas en estado crítico.
En un programa en vivo de Despierta América, la corresponsal de Univisión Irindira Navarro, rompió en llanto al compartir con la audiencia el profundo dolor que estaba viviendo, tanto profesional como personalmente, al cubrir la noticia. La periodista, con años de experiencia en desastres naturales, reveló entre lágrimas que varios de sus amigos cercanos y seres queridos se encontraban entre las víctimas de la tragedia.
“Esto duele doble porque ahí dentro estaban amigos. Más allá de la labor periodística, hay un factor humano que toca esta fibra. Uno no piensa que le va a tocar dar noticias de seres queridos, y que ellos sean el centro de una noticia”, expresó Navarro, visiblemente afectada, mientras su compañera Satcha Pretto la apoyaba con palabras de consuelo.
La corresponsal reconoció que, a pesar de haber cubierto eventos catastróficos como terremotos, huracanes y temblores, nunca antes había enfrentado una tragedia de tal magnitud. “Es terrible. Lo comparan con los peores efectos del paso de un huracán. Más de 200 muertos concentrados en un solo lugar. Lo que nos ha tocado vivir como dominicanos es muy duro”, señaló entre lágrimas.
Navarro destacó lo desgarrador que fue ver a familias que han perdido a varios miembros en el colapso del techo y cómo hijos se quedaron huérfanos de sus padres. “Ver familias que han perdido hasta cinco miembros, ver cómo hijos se quedaron sin sus padres, es desgarrador”, agregó.
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