Cada construcción deberá tener un supervisor responsable permanente: MinVivienda

supervisiones técnicas y jurídicas independientes que realicen un acompañamiento permanente a las obras de construcción.

El ministro aseguró que con la creación del cargo de supervisor independiente se pretende que un experto apruebe y verifique el diseño y la construcción de las obras, “con esto nos estamos metiendo en el bolsillo de las constructoras pero todo es para evitar que se repita la tragedia del Space”, aseguró.

Henao reveló que las curadurías no estarán en cabeza de notarios sino se contará con la presencia de “profesionales que tengan posgrado y una experiencia geotécnica de mínimo cinco años para que sean expertos que sigan paso a paso las construcciones y tengan responsabilidad en los proyectos que aprueban”.

El jefe de la cartera de Vivienda anunció que el proyecto de ley también plantea crear la superintendencia delegada para la defensa del consumidor para controlar curadores y así sancionar a constructores que incumplan con el proyecto prometido.

Además, se crearán pólizas obligatorias y se establecerán costos adicionales en el sector de la construcción. Henao manifestó que de contar con estas medidas, el edificio Space no se habría caído hace 10 días.

Concretamente, cada construcción deberá certificar un supervisor permanente que tendrá la responsabilidad de mirar trámites y calidad de materiales, contratados de forma independiente tras demostrar cinco años de experiencia en cálculos estructurales y diseño.

En cuanto a la tragedia del edificio Space, el ministro Henao aseguró que de acuerdo a las investigaciones realizadas hasta el momento, “se puede decir que el desplome de la torre se debe a un problema de diseño”.

“El caso de Medellín dejó claro que no es un problema de suelos sino uno de estructura”, puntualizó Henao.

La tragedia del edificio Space ocurrió el sábado 12 de octubre en la noche cuando la torre 6 se vino abajo a causa de una falla estructural. Horas antes habían sido evacuados cerca de 500 residentes. En el lugar, sin embargo, permanecían nueve trabajadores, un vigilante y un estudiante universitario. A la fecha, diez personas continúan desaparecidas bajo los escombros de la torre.