Según fuentes de Blu Radio, las declaraciones que fueron trasladadas a la Corte Suprema de Justicia y las cuales enredarían al contralor de Bogotá, Juan Carlos Granados, son sobre supuestos sobornos de la firma Odebrecht para ganar el contrato de Carretera Puerto Boyacá - Chiquinquirá.
Los hechos habrían ocurrido mientras él ocupaba el cargo de gobernador de Boyacá.
Todo inició en el 2012 cuando el INVIAS le adjudicó un contrato a un consorcio conformado por Odebrecht y la constructora colombiana PISA por más de 154.000 millones de pesos, para que construyera dos puentes y pavimentara 49 kilómetros del tramo Puerto Boyacá - Chiquinquirá.
Según las declaraciones, a través del exsenador Plinio Olano, supuesto viejo aliado político de Granados, la firma Odebrecht habría pagado supuestos sobornos para ganarse el contrato que hoy, casi seis años después, no han terminado.
Hay que recordar que Granados es investigado también por la Contraloría por presuntas irregularidades en el manejo de más de 5.000 millones de pesos destinados a educación en Boyacá, mientras era gobernador del departamento.